Diez niños de los 435 nacidos en Zamora en los ocho primeros meses del año han dado positivo a alguna de las enfermedades que se buscan con la conocida como prueba del talón que se hace en bebés recién nacidos, lo que no significa que todos ellos vayan a desarrollar una de estas enfermedades, pero sí deben acudir al especialista para descartarla o confirmarla.

Son datos dados a conocer por el laboratorio de cribado neonatal del Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León (Chemcyl), que acaba de recibir el reconocimiento de la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC). Lo hace bajo una norma que garantiza la calidad y competencia técnica del proceso, el correcto funcionamiento de estas instalaciones y de los procesos que en él se desarrollan y, por tanto, la fiabilidad de sus resultados analíticos, según un comunicado de la Junta.

La acreditación de los laboratorios dedicados en el Sistema Nacional de Salud a la realización de las pruebas relacionadas con la detección precoz de enfermedades endocrino-metabólicas es una recomendación del grupo de trabajo sobre cribado neonatal del Ministerio de Sanidad que, sin embargo, sólo cumplen cinco centros analíticos en España; y uno de ellos se encuentra en la Comunidad.

La directora general de Salud Pública de la Junta de Castilla y León, Carmen Pacheco, en su condición de responsable del Servicio de Ordenación Sanitaria, encargado del control y evaluación de centros y actividades sanitarias, recibió este sello oficial de certificación a manos de la jefa del Departamento de Sanidad de la ENAC, Isabel de la Villa Porras.

Requisitos

La norma ISO 15189 plantea para su obtención requisitos tanto de gestión como técnicos para su logro, de manera que, con ella, los laboratorios demuestran de forma objetiva su calidad y su competencia técnica, condiciones que ahora han sido acreditadas por este departamento del Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León.

El Chemcyl, el centro de hemoterapia y hemodonación sobre todo conocido por la labor en la donación de sangre, es el encargado, desde diciembre de 2016, de las analíticas correspondientes al Programa autonómico de detección precoz de enfermedades congénitas, a través de la llamada prueba del talón, que se oferta a todos los recién nacidos en la comunidad entre las 48 y las 72 horas después de su nacimiento y que ha visto paulatinamente cómo se han incrementado el número de patologías a detectar, desde las cuatro inicialmente habilitadas a las doce actualmente ofertadas.

Durante ese período, el laboratorio de cribado neonatal ha implantado en su funcionamiento y procesos numerosos cambios y mejoras, que se han trasladado en cada vez más positivos indicadores de calidad y de los tiempos de respuesta, de manera que, en apenas cinco años, alcanza ahora este sello de acreditación ENAC.

Doce patologías están incluidas en el cribado neonatal de la comunidad

El programa de detección precoz de enfermedades congénitas en Castilla y León facilita el cribado neonatal de doce patologías: hipotiroidismo congénito; fenilcetonuria; fibrosis quística; hiperplasia suprarrenal congénita; anemia falciforme; deficiencia de acil-coenzima A-deshidrogenasa de cadena media; deficiencia de 3-hidroxi-acil-coenzima A-deshidrogenasa de cadena larga; acidemia glutárica tipo 1; déficit de biotinidasa; enfermedad de la orina con olor de jarabe de arce; homocistinuria; y acidemia isovalérica (las tres últimas, desde finales de abril de este año). La Consejería de Sanidad oferta esta prestación asistencial, gratuita y voluntaria, a todos los bebés que nacen en la comunidad, con el fin de diagnosticar lo antes posibles patologías que pueden hipotecar el desarrollo futuro de los recién nacidos e iniciar de la forma más precoz posible sus tratamientos, mejorando así las expectativas y la calidad de vida de los niños que nazcan con enfermedades congénitas. La estadística de este programa preventivo de Salud Pública de los primeros ocho meses del año en curso refleja 8.423 nacimientos en la Comunidad, de los que 8.415 ha participado en el cribado neonatal, un 99,9 por ciento del total (no se pudo realizar a ocho neonatos que fallecieron en las primeras horas o porque fueron trasladados a hospitales de otras comunidades autónomas); por el contrario, sí se sumaron en ese período seis bebés alumbrados fuera de Castilla y León.