Las partituras de Antonio de la Cruz Brocarte volvieron a sonar en la Catedral de Zamora gracias al concierto ofrecido por Ensemble Semura Sonora, quien rindió así homenaje al que fuera el organista de la seo zamorana a finales del siglo XVII y principios del XVIII, una figura cuya trayectoria musical ha querido reconocer esta agrupación con unas jornadas bautizadas como “Sonoridades Olvidadas”.