La delegada territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, Clara San Damián, y el presidente de la Diputación Provincial, Francisco José Requejo, hicieron balance este martes de la reunión mantenida el día anterior con la consejera de Sanidad, Verónica Casado, para abordar una reordenación que aspira a limitar los problemas asistenciales que padece el amplio territorio de la comunidad. Los dos dirigentes zamoranos, vinculados a los partidos que forman parte del Gobierno regional, reconocieron que la situación debe mejorar para que los ciudadanos del medio rural puedan acceder a una atención adecuada.

En ese sentido, San Damián reconoció que “está claro que hay que mejorar el sistema sanitario” en Zamora, a la vista de los problemas que se están generando, sobre todo en el medio rural. Ahora bien, la responsable autonómica apuntó que ya “existe un compromiso de no cerrar un solo consultorio”, como ha repetido en varias ocasiones el presidente de la Junta, aunque matizó que los centros abrirán según el tamaño de cada núcleo. Es decir, en pueblos de menos de 50 habitantes, a demanda; en los de 50 a 100, un día a la semana; y en los de 100 a 500, los días laborables.

Lo que sí concedió San Damián es que hay que arreglar “cuanto antes” cuestiones como los problemas de atención telefónica para la cita previa: “Hemos tenido un verano de saturación de llamadas, pero asumo y transmito las quejas”, comentó la delegada territorial, que no descartó la opción de incorporar más personal.

En esa línea, Requejo lamentó que “no puede ser que, a veces, ni se coja el teléfono para la cita previa”. Bajo el punto de vista del presidente provincial, hay que trabajar para que haya una mejor sanidad y para que aumente la calidad de la asistencia a la ciudadanía

“Ellos nos han asegurado que va a haber médicos y enfermeros asignados a cada persona, que se va a aumentar la inversión en atención primaria y que van a mejorar la conectividad”, zanjó Requejo.

La delegada territorial insiste en que el hospital está “repleto”

“Tenemos el hospital repleto”. La delegada territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora volvió a expresar su preocupación por la situación en la que se encuentra en el Complejo Asistencial, saturado tras “un verano de muchos pueblos llenos”. Por segundo día consecutivo, la responsable autonómica aludió a esta circunstancia y expresó su confianza en que la llegada del otoño apacigüe la situación para evitar una problemática mayor.

Lo cierto es que, según los datos actualizados diariamente por la Junta de Castilla y León, Zamora cuenta ahora mismo con más de 300 personas ingresadas en el Complejo Asistencial por diferentes patologías. En concreto, 310: 8 de ellas en la Unidad de Cuidados Intensivos y las 302 restantes en la parte de planta.

Precisamente, esta zona tiene una ocupación que supera el 75% de su capacidad por culpa de la presencia de numerosos enfermos que padecen patologías ajenas al COVID, y es que esta situación se está produciendo en un contexto en el que la pandemia no se encuentra, ni de lejos, en uno de sus puntos más críticos. No en vano, el Complejo Asistencial solo cuenta ahora con catorce pacientes COVID, once de ellos en planta y los otros tres en la UCI.