La Junta de Castilla y León comunicó este viernes que algo más de un 0,8% de los usuarios de residencias de la provincia de Zamora está padeciendo el coronavirus un estos momentos. En total, son 35 personas del total de 4.109 que residen ahora mismo en estos centros para mayores o personas con discapacidad. La cifra supera ligeramente la media de la comunidad autónoma, aunque se mantiene muy lejos de los datos reportados en las olas previas, cuando la vacuna aún no había llegado.

En todo caso, las residencias zamoranas también siguen lamentando el fallecimiento de algunos usuarios a causa del COVID, aunque todos ellos se habían contabilizado previamente, al morir en las dependencias hospitalarias. Desde que comenzó la pandemia, han perdido la vida por el coronavirus 258 personas residentes en estos centros y otras 63 fallecieron durante los primeros meses con síntomas compatibles, pero sin prueba que confirmara la enfermedad.

En cuanto a los usuarios aislados en los centros, actualmente no hay ningún residente en cuarentena con síntomas compatibles con la enfermedad, aunque sí hay catorce que viven sin contacto con el resto de sus compañeros por mera precaución, según el parte facilitado por la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, dirigida por Isabel Blanco.

Precisamente, la política zamorana se encargó de repetir este viernes, una vez más, que la situación en las residencias está “controlada” y que la cifra de casos sigue sin ser elevada, unas declaraciones que fueron en la línea de lo manifestado en la jornada anterior por el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, que abogó por poner los números en contexto y evitar alarmas excesivas.

Aun así, ambos dirigentes insistieron en la importancia de mantener la precaución, especialmente durante las visitas a los usuarios, para evitar posibles riesgos en poblaciones vulnerables.