“El futuro de Zamora está en entredicho”, ha sentenciado el presidente de la Organización de Profesionales y Autónomos (OPA), Luis Rodrigo, ante un verano en el que la inauguración del esperado AVE en Otero de Sanabria no ha conseguido salvar los escollos que atraviesa el sector del turismo y la restauración tras el vaciado de Ricobayo, que dice, ha perjudicado a la actividad en toda la provincia.
“Zamora vende la naturaleza”, reivindica Rodrigo en unos días en los que el desastre de Ricobayo es el objeto de todas las miradas, y que desde su postura ha afectado de lleno al turismo en toda la provincia.
El vaciado ha perjudicando incluso a la llegada del tren, en el que se había depositado la esperanza de un gran impacto económico propio a lo que supone unir Sanabria con la capital.
La pérdida de un centenar de puestos de trabajo son las primeras estimaciones que da la organización, que también espera que para inicios del próximo mes puedan concretar los datos exactos de contratos temporales durante el verano, aunque adelantan, han descendido respecto a 2020.
Los autónomos que desempeñaban actividades de tiempo libre o ligadas al agua, como embarcaciones de recreo, barcas o pesca, son otros de los grandes afectados en términos económicos y de empleo, aunque aún se desconocen los datos.
Rodrigo ha criticado la inacción política en la provincia, y en relación al tren, que confiesa “está siendo un éxito” critica que la administración no haya puesto en marcha lanzaderas que conecten la estación con los principales núcleos y puntos turísticos de la comarca sanabresa.
Desde la Organización de Profesionales y Autónomos alertan sobre la proliferación de lanzaderas privadas: “Se están montando por cuenta ajena. Los políticos tenían que tener previsto esto”, y su presidente critica que ha visto mas reivindicación por parte de políticos del otro lado de la raya que de los locales.
Además, la organización mantendrá reuniones durante las siguientes semanas con plataformas y alcaldes de pueblos afectados por el desembalse de Ricobayo “hay que aunar esfuerzos, cada vez somos menos”.
La situación de los ríos de Zamora y del embalse son la principal causa de la pérdida de empleos. Ante el descenso de la reserva hídrica en la provincia, el turismo ligada a ella también ha caído. “Se han cortado las actividades de la zona”, que comprenden tanto el turismo como el comercio o la restauración, donde la contratación o se ha reducido o ha sido “nula” este verano.
