El nivel del embalse de Ricobayo ha pasado del 95 al 12% de su capacidad en cuatro meses. La empresa Iberdrola ha duplicado los controles de calidad del agua sobre el río Esla y no ha constatado ninguna posible irregularidad producida por el vaciado.

La compañía, ante el malestar surgido en los pueblos ribereños por la brusca bajada del nivel del agua en un periodo de tiempo tan corto, ha indicado que la explotación hidroeléctrica se está realizando dentro de la normalidad y el rango permitido.

Además, ante las continuas quejas, ha querido recordar que en los últimos 25 años ha habido un total de ocho ocasiones en las que el nivel del pantano ha sido inferior al actual. Sin embargo, aunque esta situación no sea excepcional, han decidido duplicar los controles de calidad del agua que se realizan de manera habitual con el objetivo de controlar el riesgo de afección al medio acuático.

Al respecto de estos controles, Iberdrola precisa que, hasta la fecha, “no se ha detectado ningún parámetro que presente valores fuera de lo habitual”. Además, ha detallado que la única concesión de abastecimiento informada es la del municipio de Muelas del Pan y asegura que desde la empresa han estado en contacto y coordinación permanente con el ayuntamiento de la localidad afectada.

La empresa que gestiona la producción hidroeléctrica del embalse de Ricobayo enmarca la brusquedad del vaciado en el contexto energético español y en la subida del precio del gas determinado por los mercados internacionales.

Iberdrola explica que la generación hidroeléctrica se utiliza cuando más aporta al sistema y se necesita, bien porque en esos momentos no hay disposición suficiente de otras fuentes de generación o porque sustituye a otras más caras.

Según Iberdrola, frente a las circunstancias de los últimos meses con la subida del precio del gas, el sistema energético español ha podido contar con la producción hidroeléctrica para satisfacer la demanda de los ciudadanos a un precio inferior que si se hubiese cubierto con centrales de mayor coste.

Además, la empresa ha resaltado que la producción hidroeléctrica de los últimos meses, ha sido clave para limitar la escalada de precios de la electricidad asociada al incremento de los del gas, realizado en un contexto de excusas aportaciones hidráulicas.

Por estos motivos, Iberdrola justifica el vaciado de Ricobayo alegando que se han utilizado las reservas de los embalses que se recuperan en épocas de lluvia. Además, desde la empresa se insiste en que su uso se está realizando “con todos los condicionantes medioambientales y en coordinación de las autoridades competentes”.

A pesar de todo, los alcaldes de la veintena de municipios del entorno afectados han iniciado diversas acciones de protesta respaldadas por la Diputación de Zamora.