El tarifazo eléctrico está pasando demasiada factura a los empresarios zamoranos, que han recibido un nuevo revolcón cuando apenas intentaban ponerse de pie tras la paralización de la actividad causada por la irrupción del coronavirus. Y es que, la sensación de la patronal es que ellos van a sufrir un doble castigo. Por una parte, tendrán que asumir la subida de los costes de la luz como el resto de los ciudadanos. Y, por la otra, padecerán una paralización del consumo, al considerar que el ciudadano gastará menos por tener que hacer frente a esos mismos costes en sus hogares. Por eso, han lanzado un llamamiento al Gobierno para que interceda en este conflicto antes de que sea demasiado tarde. Con estos costes fijos, no será fácil aguantar el vendaval.

El presidente de CEOE-Cepyme en Zamora, José María Esbec, ha lamentado que este subidón de la luz se produzca en un momento clave para la recuperación del sector. “Las empresas soportan unos costes fijos que ya son altísimos de por sí, y el coste energético es de los más elevados, así que la situación es demasiado complicada para los profesionales zamoranos”, ha señalado en declaraciones a este diario. “Además, para nosotros supondrá un doble mazazo, porque tendremos que pagar esas facturas de la luz absolutamente disparadas y sufriremos un frenazo en el consumo, porque la gente dejará de gastar”, ha añadido el máximo representante de la patronal zamorana.

Después de un año y medio de complicadas vicisitudes y cuando el sector privado comenzaba a repuntar, ha llegado este tarifazo para echar por tierra las expectativas de mejora de este año 2021. “Lo que necesitan ahora las empresas es aligerar costes y no incrementarlos, por lo que no podemos hacer otra cosa que denunciar esa situación y pedir al Gobierno que medie, porque para nosotros es prioritario que los recibos comiencen a bajar cuanto antes”, ha manifestado José María Esbec.

Los precios de la electricidad han tocado máximos históricos en las últimas semanas y eso ha caído como una auténtica losa sobre los intereses de los empresarios zamoranos, que temen un nuevo frenazo en la actividad sin haberse repuesto del todo de la crisis del coronavirus. Una tesitura más que difícil para un ya de por sí depauperado tejido empresarial que tan solo necesita aire tras demasiados meses tirando únicamente de las reservas adquiridas. Y es que, el golpe de la pandemia se ha sumado a este nuevo tarifazo, dejando así al sector absolutamente diezmado.

A lo largo de las últimas semanas, empresarios de la provincia de Zamora han denunciado incrementos de hasta cien euros en la factura de la luz, con el desfase que eso supone en el balance de los ingresos y los gastos. Por esta razón, desde CEOE-Cepyme de Zamora han pedido al Gobierno de España que actúe “con urgencia” sobre esta problemática para tratar de aligerar los costes que soporta sobre sí el empresariado. Con estos precios, alertan, el futuro será más que difícil para quienes mantienen un negocio abierto, sea de la tipología que sea.

El incremento del recibo en los hogares lastra el gasto fuera de ellos

La ecuación es sencilla. Si los ciudadanos incrementan sus gastos dentro del hogar, a la fuerza reducirán su consumo en el exterior. Esta es la alerta que ha lanzado CEOE-Cepyme de Zamora, consciente de que la situación del bolsillo de los zamoranos no es nada halagüeña. No en vano, de acuerdo con un estudio de Facua, el recibo de la luz subió en los hogares un 36% durante el mes de julio en comparación con el mismo mes que el año anterior. Según estas cuentas, la factura se situó en este periodo de tiempo en 85 euros de media, lo que supone casi 23 euros más que hace justamente un año. Ante este escenario, la organización ha reclamado al Gobierno que cambie ya las reglas de las subastas eléctricas y que mantenga la rebaja del IVA en un 10% de forma permanente. Unas medidas que han propuesto junto con la aprobación de un nuevo modelo de bono social que represente al menos un 50% de descuentoen la factura y del que se puedan beneficiar las familias.

Una media de 80 euros al mes para hacer frente al suministro

En lo que va de año, de acuerdo a los datos oficiales, el recibo de la luz del usuario medio ha sido de 80,48 euros en enero (subida interanual del 18,5%), 62,08 euros en febrero (bajada interanual del 3,8%), 70,90 euros en el mes de marzo (+18,0%), 81,55 euros en el mes de abril (+46,4%), 82,13 euros en mayo (+45,4%), 81,27 euros en junio (+34,2%) y 85,34 euros en julio (+36,2%). Este pasado lunes 2 de agosto el precio medio de la subasta diaria del mercado mayorista es el tercero más alto de la historia, con 103,07 euros el megavatio hora (MWh), y el 21 de julio batió todos los récords con 106,57 euros, mientras que el segundo precio más alto a nivel histórico fue el del 11 de enero de 2002, cuando se situó en 103,76 euros. En julio de 2020, el precio del kWh se situó en una media de 11,88 céntimos, y en julio de este año, el precio medio ha sido de 13,65 céntimos en horario valle, 18,13 céntimos en horario llano y 29,14 céntimos en horario punta, según los mismos datos.