La Zamora Vaciada cree que parte del dinero que el Gobierno va a invertir en los aeropuertos de El Prat y de Barajas debería destinarse a cuestiones que favorezcan la vertebración territorial en lugar de inyectarlo en proyectos “centralizadores” para lugares que ya tienen muchos recursos. Así lo entienden colectivos como Jóvenes de Castilla y León o la Coordinadora Rural, que pusieron el foco en la necesidad de fomentar la cohesión y de cumplir con algunos de los compromisos realizados por el Gobierno en esta misma materia.
En ese sentido, desde la plataforma juvenil advirtieron de la existencia de “un país que funciona a dos velocidades” y cargaron contra la inversión de 3.300 millones de euros que se prevé para los aeropuertos de Madrid y de Barcelona mientras Castilla y León y Zamora claman “por unas infraestructuras dignas” y por la ejecución de proyectos pospuestos durante décadas, como la construcción de los tramos de la autovía A-11 en los lugares por donde discurre la N-122.
Así lo indicó una de las representantes del colectivo, Almudena Pérez, que tildó ese caso concreto de “sangrante” y que recordó que algunos de los tramos de carretera más peligrosos del país se encuentran en esa N-122. En el caso de Zamora, esta vía a su paso por Trabazos constituye uno de los puntos negros que sigue esperando que la autovía ponga fin al peligro.
Pérez recalcó que es “importantísimo y estratégico” lograr que se ejecute la autovía hasta la frontera con Portugal y lamentó que la centralidad siga ganando terreno mientras el compromiso con esta carretera no se cumple: “Creemos que no se busca favorecer la cohesión”, insistió la portavoz de Jóvenes de Castilla y León.
En la misma línea, el portavoz de la Coordinadora Rural, Chema Mezquita, criticó la existencia de un modelo que perjudica a la periferia y aseguró que la estrategia de país sigue buscando “destinar fondos donde ya había mucho”, en lugar de apostar por “construir” .
En el caso concreto de la N-122, Mezquita habló de un problema de “desidia” y comparó el posicionamiento de los partidos en torno a esta cuestión con el discurrir del río Guadiana: “Va y viene. Cuando están en la oposición, es una infraestructura prioritaria; cuando están en el Gobierno, deja de serlo”, subrayó el responsable del colectivo contra la despoblación, que opinó que “se prima el interés partidista y no el de los territorios”.
Los fondos europeos
El reparto de los fondos de recuperación es una de las cuestiones que preocupa a los colectivos que batallan por la repoblación y la cohesión territorial. Al hilo de esto, Almudena Pérez deslizó que le gustaría esperar un reparto justo, pero trasladó una mala sensación al respecto tras las reuniones mantenidas con las administraciones: “Les hemos exigido transparencia y una concurrencia competitiva que sea justa, pero creemos que todo se mueve por detrás, entre bambalinas. Necesitamos que esto cambie para que el dinero llegue al territorio”, explicó.
Por su parte, Mezquita indicó que, en la gestión de los fondos europeos, se habla de reconstrucción, pero “no de construir donde no había nada”. “Se mencionan grandes proyectos, pero no se va al territorio”, aseveró el representante de la coordinadora rural, que remarcó que, “después de muchas reuniones”, nadie ha sabido aclararles qué camino deben seguir los pequeños agentes que quieran acceder al reparto en su zona.
Desde los dos colectivos apelaron a la necesidad de seguir batallando para que las provincias despobladas reciban la atención requerida y para que los fondos también sirvan para solucionar las necesidades de los pueblos.
