Tres de cada cuatro zamoranos han recibido, al menos, la primera dosis de la vacuna contra el COVID, según los datos actualizados diariamente por la Consejería de Sanidad. La provincia roza ya los 230.000 sueros administrados, tras una semana en la que los avances por grupos etarios han llevado a las generaciones de 1991, 1992, 1993, 1994, 1995 y 1996 a iniciar el proceso de inmunización. Además, si todo marcha como esta previsto, en el arranque de agosto será el turno ya de los nacidos hasta el año 2002.

De este modo, la provincia continúa avanzando hacia un escenario más esperanzador, con dos tercios de los ciudadanos vacunados ya al completo después de siete meses de inmunizaciones. Solo una ralentización en la llegada de nuevas dosis pondría en peligro la posibilidad de que Zamora alcanzara el 70% de su población con la pauta completa durante el mes de agosto, un objetivo que está al alcance de la mano, como también reconoció recientemente la consejera de Sanidad.

Mientras ese objetivo se alcanza, otra de las preocupaciones sigue siendo el desarrollo de la quinta ola en la provincia, cuyos efectos se han dejado notar desde el punto de vista de las hospitalizaciones. De hecho, hace apenas una semana, el Complejo Asistencial llegó a albergar a más de 40 pacientes COVID en sus dependencias, una situación que ha ido mejorando en los últimos días.

Así, Zamora cuenta actualmente con 28 personas ingresadas por coronavirus, 26 de ellas en planta y otras dos en la zona de críticos. Se trata de una mejora que permite vislumbrar la caída de la quinta ola también desde el punto de vista de las hospitalizaciones. Eso sí, conviene recordar que, durante esta semana, dos personas perdieron la vida a causa del COVID en la provincia, un dato que deja patente que el virus sigue aquí y que, además, continúa dañando a la población, más allá de que las vacunas hayan reducido su impacto en los últimos meses.

Otro de los datos que subraya que la crisis sanitaria permanece abierta tiene que ver con los brotes activos que hay en la provincia actualmente. En total, son 83 focos con más de 400 contagios vinculados, unas cifras muy elevadas cuyo descenso ejercerá también como termómetro de la bajada de la incidencia en Zamora.

Por el momento, el escenario pide prudencia, y más ahora cuando la provincia seguirá llenándose de visitantes en pleno agosto.

La incidencia acumulada se mantiene todavía por encima de 500

La incidencia en la provincia se mantiene por encima de los 500 casos por cada 100.000 habitantes a 14 días, según los datos que actualiza diariamente la Junta de Castilla y León. En concreto, la tasa se sitúa en 532, con una tendencia a estabilizarse, pues la incidencia a una semana es ahora de 252. Estos números evidencian que Zamora ha salido de la fase más dura de la quinta ola y muestran que la situación es mejor que la del conjunto de Castilla y León, donde la tasa a 14 días se coloca todavía por encima de 700. Por otro lado, en lo que se refiere a los datos del día, Zamora registró este viernes 82 nuevos casos de coronavirus, una cifra similar a la de jornadas anteriores. Además, el viernes se zanjó sin nuevos fallecimientos, por lo que la cifra de decesos en el Complejo Asistencial sigue en 439.