Zamora registró en la semana que acaba de finalizar un total de 476 casos nuevos de COVID, una cifra que confirma una bajada con respecto a la semana anterior –donde se acumularon 687 pacientes nuevos— del 30%, por lo que parece que la pandemia va remitiendo, al menos en esta segunda quincena, puesto que ya la semana anterior los datos también se habían reducido en 171 casos. Poco que ver con comienzos del mes, cuando la incidencia se disparó hasta unos picos nada desdeñables desde el comienzo de la pandemia.
El día en el que se registraron más casos fue el miércoles, con nada menos que 152 positivos, mientras que el resto de la semana variaron entre los 84 del sábado y los 25 tan solo de la jornada del domingo, la cifra más baja de la semana. Con estos últimos datos, el total de casos confirmados acumulados en la provincia de Zamora se sitúa en los 16.386 pacientes. Y una semana más, la cifra de fallecidos por COVID-19 se mantiene en Zamora en los 437 casos.
Con respecto a las altas hospitalarias, los datos desvelan que han salido del Complejo Asistencial un total de 2.041 zamoranos desde el inicio de la pandemia que han superado la infección. En la actualidad, están ingresados en planta 34 pacientes —cuatro más en las últimas 24 horas—, manteniéndose cuatro hospitalizados en unidades de críticos, con un porcentaje de ocupación de COVID en la Unidad de Cuidados Intensivos que alcanza el 24%.
En el apartado de las hospitalizaciones los datos sí que son más altos que en semanas anteriores, ya que, mientras hace quince días había solo ocho personas ingresadas en planta a causa de la pandemia, el impacto de esta quinta ola en la provincia ha provocado que el número de ingresados casi se haya triplicado.
El mapa de incidencia borra el granate en varios puntos
El mapa de incidencia de casos de coronavirus en la provincia de Zamora está dejando atrás en algunas comarcas el temido color granate, aquel que denota un nivel de riesgo “muy alto”. En tan solo una semana, han salido de la zona más peligrosa varios municipios de comarcas como Sanabria, Alcañices, Sayago o el valle de Vidriales, aunque algunas continúan en esa franja, como es el caso de Toro, con una incidencia de 680 casos por cada 100.000 habitantes en la tasa de incidencia a siete días. Aunque Zamora capital también se encuentra en situación de riesgo muy alta, su tasa de incidencia baja hasta los 275 casos por cada 100.000 habitantes en siete días. En similar situación está otra cabecera de comarca como es Benavente, con 281 casos. Otros pueblos en riesgo máximo son Mombuey, Puebla de Sanabria, Riofrío de Aliste, San Vitero, Santibáñez de Vidriales o Villanueva del Campo, entre otros. Las localidades que están en riesgo alto, según los datos de la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León son Trabazos, Bermillo de Sayago, Fermoselle y Corrales del Vino. Por su parte, en riesgo medio está Villaralbo, con una tasa de incidencia a siete días de 55 casos por cada 100.000 habitantes.
