El centro de distribución de Cruz Roja Española de Zamora repartirá a 860 personas, unas 280 familias, 12.982 kilos de comida. La acción forma parte de la primera fase del Programa 2021 de Ayuda Alimentaria a las personas más desfavorecidas, puesto en marcha por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) a través del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA). El objetivo de este programa es el de promover y reforzar la cohesión y la inclusión social para ayudar a poner fin a la pobreza.

El Programa 2021 de Ayuda Alimentaria a las personas más desfavorecidas cuenta con una cofinanciación de un 85% del Fondo de Ayuda Europea para las personas Más Necesitados (FEAD) en alimentos y un 15% del presupuesto de la Administración General del Estado.

Los alimentos repartidos son de primera necesidad, poco perecederos y de fácil transporte y almacenamiento, como leche UHT, las conservas, pastas y legumbres. Los alimentos de la cesta han sido elegidos con la colaboración de la Federación de Bancos de Alimentos, junto con Cruz Roja Española y expertos en nutrición.

Los beneficiarios de estos alimentos son persona que se encuentran en situaciones problemáticas, como escasez de ingresos, desempleo, paro prolongado o problemas de vivienda o salud.

A nivel nacional, Cruz Roja Española repartirá 11,8 millones de kilos durante los dos próximos meses a más de 750.000 personas a lo largo del país.

Además de esta iniciativa, Cruz Roja ha iniciado otras de ayudas para la alimentación debido a las consecuencias económicas, sociales y laborales que ha traído consigo la crisis sanitaria del COVID-19. Los proyectos tienen el objetivo de dar respuesta a las necesidades emergentes, adaptando y ampliando las actividades ordinarias de la ONG para hacer llegar las ayudas a más personas de una forma más rápida y eficaz.

Algunas de los proyectos más destacados son las entregas de cestas de alimentos y productos de higiene a familias que se quedan fuera de otras ayudas; o las “tarjetas monedero”, con las que los beneficiarios pueden ir a comprar a diferentes establecimientos en función de sus necesidades, lo que les permitiría poder adquirir comida fresca.

Una parte importante de esta labor es la participación solidaria y comprometida de todo el personal voluntario y de las empresas que, de manera altruista, han aportado su grano de arena con diversas donaciones para ayudar a paliar las necesidades alimentarias. También ha sido esencial la colaboración y coordinación con las instituciones y administraciones.