En España se calcula que hay más de tres millones de personas asmáticas y entre ellas un 10% de los pacientes son niños entre 6 y 7 años, y el 9% son adolescentes entre 13 y 14 años. Estos datos hacen que esta patología respiratoria sea una de las que más hospitalizaciones infantiles y ausencias escolares provoque. Además, en los casos diagnosticados con asma grave, tanto en niños como adultos, se estima que existen 80.000 pacientes que no lo tienen bien controlado; así mismo, la prevalencia del asma autopercibido está entre el 5 y el 14 por ciento de la población. Milagros Lázaro Sastre, adjunta del servicio de alergia del Complejo Asistencial de Zamora es una de las especialistas que en su práctica diaria atiende a este tipo de pacientes con asma.

—¿Qué es el asma infantil, en qué consiste esta enfermedad?

—El asma es una enfermedad respiratoria crónica, inflamatoria y que cursa con estos síntomas de tos, dificultad para respirar y pitidos en el pecho. Cuando llega a la consulta el paciente nos refiere síntomas como la tos, falta de aire en el pecho, nos dice que escucha como silbidos y a veces todo eso se asocia con una sensación de opresión en el pecho y dificultad para respirar en general. Estos síntomas son muy sugestivos de que pueda haber asma.

—¿Qué pasos se siguen para comprobarlo?

—Nosotros en la consulta lo que hacemos es tratar de ver si eso que le pasa al paciente, sea niño o adulto, la causa de estos síntomas, es una oclusión en el bronquio. Tenemos que poner de alguna forma de relieve que eso es debido a que hay una obstrucción bronquial. Y eso se hace con lo que llamamos pruebas de función respiratoria, la clásica espirometría.

—La prueba en la que hay que soplar por un tubo.

—Ese aparato lo que mide son una serie de parámetros con los que nosotros podemos saber si existe o no una obstrucción bronquial. Y caso de existir, lo que buscamos es si es reversible o no, es decir, si podemos hacer que desaparezca utilizando en la consulta un tratamiento, un broncodilatador.

—¿Que características tiene el asma infantil?

—El asma es una enfermedad que se puede dar tanto en niños como en jóvenes y adultos. En niños por debajo de 3 o 4 años es difícil hacer estas técnicas para diagnosticarla y hay veces que hay que recurrir a otras pruebas, pero en niños ya más mayores y el adulto no hay ningún problema. La inflamación bronquial puede tener varios orígenes y desde luego en niños y pacientes jóvenes una de las causas desencadenantes principales es la alergia. Por eso es tan común que nosotros en nuestras consultas de alergia veamos pacientes con asma, porque realmente hay veces que es difícil de diferenciar.

—Ahora en esta recién concluida primavera, por tanto, puede ser mala época también para los asmáticos.

—Ahora que hemos estado en primavera el paciente alérgico se expone al polen y le desencadena una reacción inflamatoria en las vías respiratorias, en la nariz, a veces en la conjuntiva y también en el bronquio. Y esta inflamación bronquial se manifiesta con los síntomas del asma. Así que va muy unido en este sentido. Entonces vemos muchos pacientes con síntomas de asma en este momento, porque se exponen a aquello que les da alergia y tienen sintomatología.

—¿Hay alguna edad típica de debut en los pacientes asmáticos?

—El asma puede aparecer en diferentes edades de la vida, vemos asmas en niños, en adolescentes, jóvenes y adultos. Es verdad que el asma cuando se asocia a alergia suele comenzar en la infancia o en la adolescencia-juventud, aunque puede aparecer también más tarde. Pero abarca todo el espectro de edades, hay asma también de debut en el adulto.

—¿Qué pronóstico tiene esta patología?

—Uno de los factores que influye en el pronóstico de la enfermedad a largo plazo es realizar un tratamiento adecuado, porque repercute tanto en el control del asma en un momento adecuado como en un riesgo futuro. Cuando es un asma desencadenado por factores alérgicos hay que tratar de evitar la exposición a aquello que da alergia y la respuesta en el bronquio. Por ejemplo, un paciente que tiene un perro en casa y es alérgico al epitelio de perro, si su enfermedad solo se debe a eso, si puede dejar el domicilio, los síntomas pueden desaparecer. A veces esto no se puede hacer, por ejemplo, el alérgico al polen en primavera, porque debe salir a la calle. En estos casos tenemos otras posibilidades, como administrar las vacunas para tratar la alergia (inmunoterapia) que reducen la sensibilización al alérgeno, al agente que provoca la alergia al paciente. Son los tratamientos etiológicos, es decir, actuando sobre a la causa.

—¿Y cuando hay una crisis?

—Tenemos tratamientos sintomáticos para el asma, que son los inhaladores, con dos grandes grupos, el primero los tratamientos de rescate o de alivio, que son los llamados broncodilatadores. En un momento concreto, si el paciente está con síntomas o tiene una crisis, hay que aplicarlos. El segundo serían los tratamientos controladores o de mantenimiento que se hacen a largo plazo con el fin de reducir la inflamación y que el paciente no tenga síntomas. Tenemos tratamientos de distinto tipo para el asma en función de las características del paciente. Lo que intentamos es controlar el asma para evitar que en el futuro haya mayores problemas, que avance la enfermedad, que haya una alteración de la función respiratoria permanente, que el paciente tenga que acudir a urgencias porque tenga crisis importantes porque tenga que ingresar. Todo esto tratamos de evitarlo con todos esos tratamientos.

—Las crisis asmáticas son muy llamativas.

—Hay de todo tipo. Hay crisis leves, moderadas y graves. En una crisis grave el paciente no puede respirar y es una situación de urgencia médica, hay que poner rápidamente tratamiento, evaluar el paciente y si no responde incluso puntualmente algunos pacientes tienen que ingresar en la UCI para tratar el momento más agudo. Luego hay unos pacientes que tienen crisis más leves o moderadas que se pueden tratar bien a nivel ambulatorio en el centro de salud o en la urgencias pero que no exigen hospitalización, depende de la gravedad.

—¿Qué incidencia tiene la enfermedad, va a más, como las alergias?

—La tendencia de las enfermedades alérgicas es a aumentar y así el asma si está desencadenado por las mismas, puede tener mayor relevancia. Las enfermedades alérgicas son muy prevalentes, un tercio de la población puede tener una enfermedad alérgica, y ha aumentado en los últimos años.