La Consejería de Economía y Hacienda ha ampliado el plazo de solicitud para las ayudas directas a autónomos y empresas hasta el próximo 20 de julio. El Boletín Oficial de Castilla y León publicó el pasado martes la orden de modificación de la anterior, publicada en mayo, que aprobó las bases reguladoras de las ayudas directas a autónomos y empresas para el apoyo a la solvencia y reducción del endeudamiento del sector privado. La Consejería de Economía y Hacienda ya ha tramitado 492 solicitudes de autónomos y empresas de la provincia de Zamora, que solicitan 21,62 millones de euros.

La orden modifica también la forma de percepción de la ayuda con el objetivo de lograr que los beneficiarios puedan recibir el importe total de las ayudas en un plazo más corto, que ya no estará sujeta a criterios de priorización en su otorgamiento.

La cuantía de la ayuda coincidirá con el importe de la deuda y los costes fijos incurridos devengados entre el 1 de marzo de 2020 y el 31 de mayo de 2021, de forma que para los autónomos y pymes que apliquen el régimen de estimación objetiva en el IRPF, el límite de ayuda será de 3.000 euros. Para el resto de empresarios y autónomos, cuyo volumen de operaciones anual declarado o comprobado por la Administración en el IVA haya caído más del 30 % en el año 2020 respecto al año 2019, el importe no podrá ser inferior a 4.000 euros ni superior a 200.000 euros.

Estas modificaciones se han realizado tras comprobar que el número de solicitudes de ayudas es mucho menor del esperado. De acuerdo con lo manifestado por un importante número de posibles beneficiarios, las exigentes condiciones y requisitos establecidos en el propio Real Decreto-Ley 5/2021, de 12 de marzo, para la obtención de las ayudas imponen una restricción de acceso a las mismas. En concreto, la finalidad de la ayuda está limitada exclusivamente al pago de deudas vivas, y a los requisitos de caída mínima en el volumen de operaciones o la intensidad de la ayuda sobre la caída adicional respecto de la mínima exigida. Requisitos todos ellos alejados de la situación que viven los autónomos y empresas más perjudicados por la pandemia.

Tal y como se establece en el Real Decreto-Ley 5/202, la Comunidad está remitiendo a la AEAT la documentación relacionada con las peticiones de subvenciones directas, a la espera del informe favorable para proceder a su concesión y posterior pago. Cuando la Agencia Tributaria certifique que los solicitantes cumplen con los requisitos, la Junta de Castilla y León podrá comenzar a tramitar el pago de las ayudas.

Castilla y León ha sido la segunda comunidad en convocar las ayudas con el objetivo de que lleguen lo antes posible a los autónomos y pymes. Asimismo, la Junta, para facilitar el acceso a las ayudas directas, aumentó hasta los 184 los sectores de actividad, 89 más que los propuestos por el Real Decreto Ley del Gobierno, lo que ha supuesto incrementar un 94 % las actividades económicas a las que pueden llegar estas ayudas y con ello beneficiar al mayor número de empresarios afectados por la pandemia.

Por otra parte, la Junta de Castilla y León ha articulado un procedimiento ágil y simplificado para la tramitación de las solicitudes, con la menor carga burocrática para los solicitantes, utilizando siempre que sea posible la fórmula de la declaración responsable y sin exigir requisitos adicionales a los previstos en la normativa. Así, en todo el procedimiento será obligatoria la tramitación electrónica.