El "Rey Enigma" ya tiene vencedor: un ajedrecista zamorano, Alfonso Martín Carretero. Guarda como un tesoro la prueba, el enlace que ha dejado el rastro de su triunfo frente a quien se define como invencible en el tablero y lanza retos públicos en persona y desde su página web. No fue un jaque mate, pero no hizo falta, “las partidas no termina necesariamente así”, subraya el zamorano que también ha sido campeón en torneos importantes, con 40 años a sus espaldas como ajedrecista. “Puedes ganar también cuando el contrario tiene menos peones que tú”. Así fue como el abogado de profesión logró vencer al intocable el 30 de mayo, a las 21.44 horas.

El triunfo que no ha traído aparejada la recompensa de cien euros que el Rey Enigma sí entrega, como gancho, en el parque del Retiro de Madrid, donde acude totalmente oculto bajo su disfraz con corte similar al de Spiderman, con estampado que remite al tablero de ajedrez. Martín Carretero, que desconoce la auténtica identidad del ya famoso ajedrecista, sabe que se trata de “un veterano jugador” y que es “un experto en marketing” que un buen día decidió poner en práctica una forma original de “promocionar este deporte, darlo a conocer, ganarse adeptos”. Y quizás al hilo de la famosa película “Gambito de dama” que logró enganchar al gran público con la inteligencia de una joven ajedrecista invencible frente a míticos jugadores rusos cuando dominaban el deporte los hombres.

El “Rey Enigma”, el mejor streamer y YouTuber de ajedrez según “Siri”, no solo se instala con su tablero en el Retiro, acude a programas de televisión de máximas audiencia, también dispone de una página, la www.chess24.com, para difundir el ajedrez, desde donde lanza los mismos “desafíos públicos”, agrega Martín Carretero. El zamorano, llevado por ese instinto de jugador que busca ponerse a prueba frente a los grandes, se coló en el sitio web “y le gané”. Sin jaque mate, “no hizo falta, tenía dos peones de ventaja y dominio del centro”, espeta.

El Rey Enigma en su cuenta de Twitter

¿Y la partida? “Se jugó una apertura Holandesa, que es muy sólida. Seguí un esquema de atacar el centro y controlar una columna con las torres. Por un error de mi rival, se dejó hacer una combinación que le costó un peón. Posteriormente, tratando de complicar, mi rival debilitó otro peón que finalmente perdió sin compensación. Por eso, viendo que tenía dos peones de menos y una posición sin posibilidades, prefirió abandonar”.

Las partidas son de tres minutos para cada participante por cada una de ellas, sin que se puedan incrementar los tiempos, ilustra Martín Carretero, que fue colaborador de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA con una página de ajedrez e integrante del Club de Ajedrez de El Círculo de Zamora, donde se jugaba de forma periódica y se organizaba un torneo de reyes, que la Delegación Provincial de Ajedrez está pensando en retomar.