La Casa de Zamora en Madrid estrenará su nuevo rol de “embajada” en septiembre. Así lo confirmaron este martes fuentes de la Diputación Provincial, que indicaron que la idea es reabrir las instalaciones después del verano, una vez la vacunación haya avanzado y la normalidad esté más cerca. El plan inicial de los responsables del inmueble y del propio equipo de Gobierno de La Encarnación era adelantar la inauguración a finales de junio, pero cuestiones relacionadas con la agenda y con el propio desarrollo de la pandemia han movido la fecha en torno a dos meses.

Una de las estancias que tendrá la Casa de Zamora. | Cedida

En todo caso, la información trasladada por los responsables provinciales es que las obras estarán listas en las próximas semanas después de una importante inversión de 330.000 euros: 250.000 de la Diputación y 80.000 de la propia Casa de Zamora, que se ha implicado en los últimos meses en la reforma de su centro.

Aquí, además de la distribución de distintos espacios para reuniones, demostraciones gastronómicas, comedor y salas multifuncionales, esta obra incorpora un diseño que permitirá mostrar elementos de valor de la provincia. El fin último es que las instalaciones resulten útiles para organizar eventos y para que los zamoranos cuenten con un espacio donde celebrar sus actos en pleno centro de Madrid.

No en vano, el edificio se encuentra al pie de la Gran Vía, lo que constituye una importante ventaja a la hora de desarrollar acciones de promoción de los productos y los recursos de la tierra. Esa función que adquirirá en septiembre la Casa de Zamora en Madrid no entrará en conflicto con su servicio habitual de ejercer como punto de encuentro de los zamoranos fuera de su tierra, que también se mantendrá a partir del otoño.

Así, la reforma de este edificio llega para sumar, de acuerdo con el planteamiento que tienen el presidente de la Diputación, Francisco José Requejo, y los propios responsables de la Casa de Zamora en Madrid. Ambos estiman que el sitio es idóneo para poner los productos zamoranos en el escaparate de la capital, y también para que cualquier empresario o artista de la provincia lo utilice como trampolín para zambullirse en el mercado de la mayor ciudad de España.

De hecho, más allá de los eventos que organice el propio centro o de las acciones que encabece la Diputación, el plan es que la casa permanezca “abierta” para cualquier zamorano que quiera dar a conocer su trabajo y su talento, una vez la pandemia parece que puede dar, por fin, un respiro.

El presidente de la Diputación mantuvo además que existe buena conexión entre el equipo de Gobierno y los responsables del centro madrileño, por lo que ahora, una vez finalicen las obras, el trabajo se centrará en dotar de actividad a un espacio que también servirá como muestrario turístico de la provincia, y que permitirá a los visitantes conocer los atractivos naturales, culturales y monumentales que lograron elevar el número de visitantes a esta tierra en los meses previos al coronavirus.