“Memoria y olvido de la España interior: el problema demográfico” fue una mesa redonda protagonizada en el Museo Etnográfico por el escritor Julio Llamazares, el fotógrafo José Manuel Navia (que comparten trabajo en Alma Terra que se expone en el Museo Etnográfico ) y el sacerdote Teo Nieto.
Para Julio Llamazares “la situación va de mal en peor”, pero al menos se ha conseguido algo, que se hable del problema, que ha pasado al primer plano, junto con el nacionalismo. “Media España se está vaciando en favor de la otra media, y es malo para las dos, para la rica y la pobre. Se ha conseguido que esté en la conversación de la gente pero no veo ningún avance porque los políticos hablan mucho pero las políticas que llevan a cabo van en dirección contraria”.
“Se necesita un tratamiento de shock, pero con medidas tímidas y timoratas no se puede revertir una situación que ya viene de medio siglo atrás y hay provincias como Zamora que se están despoblando a pasos agigantados”. Una situación, “que se retroalimenta y llega un momento en que la propia decadencia genera más decadencia, la despoblación genera más despoblación”.
Solución cultural
El fotógrafo José Manuel Navia, habló de su proyecto, Alma Tierra que se expone en el Museo Etnográfico “ante todo un homenaje a un mundo en trance de desaparición el de la cultura campesina” y tanto a los que “resisten en la tierra de sus antepasados” como “a las personas que quieren salir de los entornos urbanos”.
Lo que más de importa, a su juicio, “es hacer valer algo que tradicionalmente no se ha querido valorar . Uno de los principales problemas es que todas las soluciones son de carácter político o económico y siempre nacen del mundo urbano yo creo que ese sería el primer cambio fundamental, empezar a escuchar a la gente que vive en esa España olvidada, vaciada o como la queramos llamar, porque hasta ahora se les ofrecen soluciones muy dudosas pero que no han nacido de ellos vienen impuestas. “Si se escucha a las personas, los colectivos, la gente que de verdad vive el territorio es la única manera de plantear las cosas de otro modo”.
El cura Teo Nieto indicó que “ya está constatada la realidad, ya sabemos las causas, aunque habría que ir a la causa primera, que es el sistema social que vivimos, el liberalismo. Y la cuestión ahora es empezar a aportar soluciones”.
Unas soluciones que, a su juicio, “tienen que ir desde la cuestión cultural para que empiece a haber una imagen positiva del mundo rural”. También es importante, básico, “generar esperanza en la gente del mundo rural para que ellos mismos sean los artífices de su transformación”. Y por último, “las infraestructuras, y ya está la dimensión política. Fíjense que hablo en tercer lugar no porque no sea importante, pero además de estas infraestructuras tiene que haber ganas de vivir en el pueblo”.
