Fiscalidad diferenciada, proyectos que generen riqueza, conexiones más fluidas con Madrid… Son muchas las vías de desarrollo que se abren para la provincia de Zamora y, de ellas, un buen número cuentan con la participación de la Cámara de Comercio e Industria en la intención de llevarlas a cabo. Enrique Oliveira es presidente de la institución, centrada ahora en “atraer empresas” y “evitar que los zamoranos sigan marchándose de su tierra”, dos puntos de actuación fundamentales después de los cuales “vendrá todo lo demás”.

–¿Qué nos ha enseñado la pandemia?

–Que lo principal es la salud y que la economía vendrá detrás. Creo que lo que ha pasado tendrá arreglo, aunque tardará. Aquí tardaremos más porque todo llega más tarde, hasta lo malo.

–Pues hablemos de economía. ¿Cómo ve el futuro de la provincia?

–No tan negro como lo pintan. Es cierto que la pandemia paralizó toda la actividad y echó a perder toda mejora que pudimos haber conseguido, pero creo que la situación mejorará. Hay proyectos en los que tenemos que trabajar, eso sí. No hace falta irnos a 18 ó 20 proyectos, basta con apuntalar cuatro o cinco para que la economía crezca.

–¿Por ejemplo?

–Es indispensable el potenciar que vengan empresas de fuera a instalarse a Zamora, mantener las que ya tenemos y reconocer los valores que tenemos en nuestra provincia. No solo en el terreno agroalimentario, sino en otros sectores industriales.

–Es fácil decirlo y más difícil conseguirlo.

–Lo ideal sería que vinieran empresas potentes, con 400 ó 500 trabajadores…

–Pero eso no va a pasar, al menos en un futuro cercano.

–Ahí voy. Hay que diversificar, traer y mantener empresas pequeñas y medianas y dotarlas de los medios suficientes. Hablando de medios, una de las principales deficiencias es la digitalización. Nos dicen que en 2025 no va a haber sombras en ningún sitio. Perfecto, eso es fundamental para que se pueda trabajar desde Zamora.

–La digitalización está bien, pero las empresas buscan más cosas.

–Sí. Si quiero traer empresas tengo que tener un proyecto que vender, un servicio que vender. Para eso hay que coordinar a las administraciones, hay que ir de la mano y el que salga a vender Zamora, por ejemplo a Madrid, tiene que hablar en nombre de las instituciones. Que pueda ofrecer suelo industrial, beneficios fiscales, trámites sencillos… Pero alguien tiene que arremangarse y ponerse a trabajar, las cosas no salen solo de hablar. Para ello hay que saber la disponibilidad que hay de terrenos, tanto públicos como privados, los servicios tecnológicos que tenemos… No se necesitan grandes cosas, hay que trabajar.

–¿Y por qué no se hace?

–Porque no es una acción que dé resultados a corto plazo, suponemos.

–Hablábamos antes de impulsar cuatro o cinco proyectos concretos para relanzar la economía. Deme algún ejemplo.

–Soy bastante optimista con el tema de Monte la Reina. Creo que se va a hacer. El próximo año ya tiene que ponerse la primera piedra, que se empiece a mover de alguna manera. El problema no es económico, ha quedado claro que es de voluntad política. La inversión pública son solo noventa millones, ya la calificaría de ridícula para la capacidad del Estado. Quiero pensar que la voluntad sigue ahí y que la pandemia ha trastocado todo.

–Monte la Reina, vale. Más cosas.

–Tenemos que luchar por lograr una fiscalidad diferenciada. Cuando escribimos a la ministra de Hacienda le pedimos un “Plan Zamora” para dinamizar la provincia. No es que se nos ocurra ahora de golpe, es que llevamos años pidiéndolo. Es fundamental para fijar población. Si queremos que una empresa se instale en el medio rural de Zamora es clave que no pague los mismos impuestos que si está en el centro de Madrid. No tiene los mismos servicios, no tiene que pagar los mismos impuestos. También pedimos reducciones de cuotas a la Seguridad Social para empresas de Zamora, que los empresarios hagan números y que se den cuenta de que, si instalan su empresa en Zamora, ahorran. Eso sería muy importante.

–Parece que la fiscalidad diferenciada está reservada, de momento, para otros territorios.

–Por eso tenemos que conseguir que Zamora sea catalogada como “zona C” para entrar a los fondos europeos. Si conseguimos eso vendrán más fondos. Esta es la lucha actual.

–Por lo oído en las últimas semanas parece que ese es el camino, pero hay obstáculos. Desde la Secretaría de Estado del Reto Demográfico avanzaron que no solo entrará Zamora a este grupo, que puede entrar alrededor de una veintena de provincias. Si ahora no vienen los fondos y, cuando vengan, hay que repartirlos con otras 20 provincias, parece que no se avanza demasiado.

–Es que no se puede meter en la misma bolsa a todas las provincias de España, eso es un error. Zamora es la provincia que más población pierde, no se puede comparar con Guadalaja, por ejemplo, que está al lado de Madrid y tiene muchas más empresas. Que alguien me diga qué provincia andaluza está peor que Zamora. Ninguna. Pero Andalucía es “zona 1” y tiene más financiación que Zamora. Si una empresa se quiere instalar en Sevilla tiene más beneficios que por venir a Zamora. Eso no tiene sentido.

–De momento, hay cosas que se hacen en otras provincias y aquí no. Por ejemplo, ha trascendido que los funcionarios que se instalen en Soria, Cuenca y Teruel tendrán beneficios económicos, pero no se habla de nada parecido en Zamora. ¿No estamos olvidados por las administraciones?

–Un poco sí. Por parte del Estado y también de la Junta. Zamora se ha visto perjudicada porque se metió a la provincia en el mismo saco que Valladolid o Burgos. No culpamos a nadie, pero se han hecho las cosas mal. Lo fundamental es conseguir que Zamora esté en el mapa de ayudas, y que esté a nivel provincial. No nos vale que solo se considere a La Raya como zona despoblada.

En definitiva, hablamos de pinceladas. Monte la Reina, el AVE, fiscalidad diferenciada... Son cosas que debería formar parte de lo que hablábamos antes, de ese paquete de servicios que tendría que vender, fundamentalmente en Madrid, alguien que hablara en nombre de todas las instituciones de la provincia de Zamora. Para esto proponemos la creación de una oficina de Promoción Económica que cuente con una persona que sea un comercial de Zamora. Hay empresas que buscan donde ubicarse y que llegan aquí casi de casualidad, bastante desorientadas. Nosotros intentamos ayudarles y algunas se quedan. ¿Por qué no se hace eso de una forma organizada? Es un trabajo lento, que no va a dar frutos de forma inminente, pero que sería muy bueno para la provincia de Zamora.