La Unión Europea ha decidido cumplir el Acuerdo de París. Es un compromiso donde se establece un marco planetario para evitar un cambio climático peligroso manteniendo el calentamiento global por debajo de los 2°C y prosiguiendo esfuerzos para limitarlo a 1,5°C. Es un acuerdo universal y jurídicamente vinculante, y fue adoptado en la Conferencia sobre el Clima de París (COP21) en diciembre de 2015. Este próximo otoño, del 1 al 12 de noviembre de 2021, se celebrará la 26 Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, (COP26), en la ciudad de Glasgow, Escocia, Reino Unido. Dicho encuentro también incluye la segunda reunión de las partes del Acuerdo de París.

Dice la Comisión Europea que el Pacto Verde, de diciembre de 2019, establece cómo hacer de la UE el primer espacio climáticamente neutro en 2050, impulsando la actividad productiva, mejorando la salud y la calidad de vida de la gente y protegiendo la naturaleza, alcanzando una transición justa. En este contexto, se puso en marcha a finales de 2020 el Pacto Europeo por el Clima.

La UE ha decidido reducir sus emisiones de GEI, gases con efecto de invernadero, un 80% en 2050, por debajo de los niveles emitidos en 1990, con reducciones del orden del 40 % en 2030 y 60% en 2040. Sabemos que el transporte es un gran emisor de GEI, superando a la actividad industrial y a la de generación de electricidad. En España, por ejemplo, el transporte es el sector más emisor de GEI y supone el 29% del total, seguido de la industria (20,6%), la generación de electricidad (13,5%) y la agricultura y ganadería (12,5%). Y por eso la UE ha declarado este año 2021 como el Año Europeo de Ferrocarril, indicando la aportación positiva que tiene el modo de transporte ferroviario a la reducción de emisiones, junto al modo peatonal y al modo ciclista.

El Ministerio del Transporte, Movilidad y Agenda Urbana está, este año 2021, en plena tarea, junto a la Comisión Europea, de revisar el Reglamento sobre las orientaciones de la red de transporte de la UE y de definir la red básica ferroviaria española que se establecerá en 2023 y se pondrá en servicio en 2030, a la vez que tiene sobre la mesa, respecto a nuestro país, la redacción del próximo plan ferroviario de servicios e infraestructuras.

Por todo ello, el Área de Transporte de Ecologistas en Acción propuso a la Coordinadora Estatal por el Tren preparar una campaña de movilización unitaria y descentralizada a celebrar en la tercera semana de octubre de este año 2021, donde el corazón de la movilidad se sitúe en ir a pie, en bicicleta y en tren, y donde el resto de modos sean complementarios. Esta movilización permitirá a la plataformas ciudadanas en defensa del tren confluir con las movilizaciones climáticas en el marco de una transición justa ecológica y socialmente.

(*) Portavoz de la Coordinadora Estatal por el Tren Público, Social y Sostenible