Zamora sigue dando pasos para escapar de la pesadilla del COVID. La provincia avanza hoy, junto al resto de la comunidad autónoma, hasta el nivel 1 de alerta ante la situación de “riesgo bajo” que percibe el Gobierno de la Junta de Castilla y León. Como en 2020, el fin de la primavera está viniendo de la mano de una desescalada que permitirá una flexibilización de las medidas sanitarias. Esto se dejará notar, entre otros ámbitos, en la hostelería, donde regresa desde este viernes el consumo de pie y en barra, vetado desde hace meses para controlar el avance del COVID.

Más allá de este aspecto concreto, casi todos los sectores lograrán un cierto alivio, con un aumento de los aforos que, de manera general, se situará en un 75%, según aclaró el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, que fue el encargado de comunicar el avance y de explicar que el dato de la incidencia, aún elevado para tal relajación de las medidas, queda solapado por la bajada del número de hospitalizaciones. Aquí, la vacunación está teniendo un impacto capital para mantener en mínimos la cifra de ingresos por COVID. De hecho, en lugares como Zamora, la UCI está vacía de enfermos de coronavirus desde hace días.

Esta situación llevó a Francisco Igea a mandar un mensaje de tranquilidad poco habitual en el vicepresidente cuando se trata de ofrecer datos sobre la pandemia: “Somos muy optimistas”, aseguró el responsable autonómico. De hecho, el número dos del Gobierno de la Junta no espera un retroceso en ninguna provincia, ni tampoco la adopción de medidas especiales en municipios como Toro, con datos más preocupantes, donde prevé que la incidencia vaya bajando en las próximas semanas.

Así las cosas, Zamora y el resto de Castilla y León se encaminan hacia un verano con menos restricciones, aunque todavía con la mascarilla como inseparable compañera. Al menos, “de momento”, según apuntó el vicepresidente Igea, consciente también de que la retirada de su uso obligatorio en exteriores se acerca un poco más con cada vacuna que administran los trabajadores sanitarios. Por lo pronto, estas son algunas de las nuevas normas que entran en vigor a partir de este viernes:

Interior de la hostelería

Aparte del regreso de la barra, el aforo de los establecimientos de hostelería y restauración y el de las sociedades gastronómicas aumenta hasta el 75% de su capacidad. Además, hasta 25 personas podrán juntarse en mesas o agrupaciones de mesas, aunque la separación tendrá que seguir siendo de dos metros. El horario de cierre tan solo estará limitado por la ordenanza municipal correspondiente.

Terrazas

En las zonas exteriores de los negocios de hostelería, deja de haber límite de aforo. Las mesas permitidas se fijarán en función de la licencia municipal de cada establecimiento. Eso sí, las mesas o agrupaciones de mesas tampoco podrán superar las 25 personas. Lo que sí sigue vigente, al igual que en interiores, es el uso obligatorio de la mascarilla, con la excepción del momento en el que se estén consumiendo alimentos o bebidas. La distancia entre las mesas será de metro y medio.

Ocio nocturno

La flexibilización de las medidas también llega a las discotecas, que podrán mantener un aforo del 50%. Ese porcentaje se elevará hasta el 75% en el caso de los pubs, karaokes y similares. El horario de cierre también quedará fijado en línea con la ordenanza municipal correspondiente.

Consumo en eventos

Una de las ventajas de este nivel 1 de alerta reside en el permiso para consumir alimentos y bebidas en eventos deportivos con público, plazas de toros y salas de cine.

Actividades deportivas

En esta nueva fase, la actividad física y deportiva estará permitida en el interior de los centros e instalaciones dedicados a la práctica de ejercicio. La Junta recuerda en su normativa la necesidad de asegurar la distancia y de dotar a los locales de la adecuada ventilación. El aforo se sitúa en el 85% en estos recintos, mientras que deja de limitarse para el deporte al aire libre.

Locales comerciales

Estos recintos y las actividades profesionales abiertas al público, se encuentren o no integradas en algún complejo, tendrán un aforo del 75%, el mismo nivel de ocupación que estará permitido en las zonas comunes de los centros comerciales.

Cautela y lavado de manos

En este nivel, se mantienen las obligaciones generales de cautela y protección, referidas al uso de la mascarilla y la distancia de seguridad, así como la recomendación del lavado frecuente de manos; también la obligación de colaborar en el cumplimiento de aislamientos y cuarentenas; o la prohibición de fumar en vía pública si no se pueden asegurar los dos metros de distancia de seguridad.

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