La falta de médicos de familia augura "un verano duro", acaba de admitir la consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, en su comparecencia sobre la evolución epidemiológica de la comunidad autónoma, un "serio problema de déficit de profesionales" al que no escapa Zamora, y que precisará de "una importante reorganización".

Casado advirtió esta mañana que no puede haber médicos de familia con 500 pacientes cuando la media es de 936 por facultativo, y negó que los contratos ofertados estén en la base de esa carencia, puesto que "los ha habido de dos y tres años, y no en lugares de difícil cobertura" como se ha dicho, "no es verdad, lo que ocurre es que los médicos optan por contratos más breves que enlazan unos con otros. Ellos eligen".

Casado admitió abiertamente que "necesitamos médicos" en Atención Primaria y que "hay que formar a más profesionales en especialidades" para echar la vista veinte años atrás y remitirse a las medidas que debieron haberse tomado entonces con una estrategia que diera respuesta al estudio que encargó el Ministerio de Sanidad y que "ya advertía de lo que está pasando" , lo que sucedería "entre 2020 y 2025". La consejera confío en que Castilla y León pueda contar con médicos más formados.

Previsión de pasar a la fase 1

La responsable de Sanidad no quiso avanzar si el Gobierno autonómico del PP decidirá mañana pasar a la fase 1 de alerta sanitaria, pero anticipa que "las cosas pintan bien, la idea es definir el ámbito territorial, si será por provincias o por comunidad, porque ya llevamos dos semanas en fase 2 y es previsible que se pase a fase 1", aunque matizó "si todo va bien".

Mientras, pedía "prudencia a la población porque la movilidad y el contacto social son claves la evolución de los niveles de contagio", si bien la vacunación está funcionando "mejor de lo esperado", de modo que, tanto Zamora como el resto de provincias han logrado una buena situación respecto de la incidencia de la pandemia en la población. Recordó que "el riesgo de contagios aumenta en espacios cerrados, parece que en abiertos no hay tanta incidencia".

Respecto de la provincia, destacó que al llegar a reducir los contagios en cifras como la que se da en Zamora, "llegar a un nivel más bajo cuesta más", sin que exista ninguna otra explicación que haga pensar en una evolución de casos negativos.

COVID Persistente, al médico de familia

Por último, la consejera estuvo acompañada por el director general de Planificación y Asistencia Sanitaria, Alfonso Montero, para presentar el Plan de Atención Integral al COVID Persistente, que tendrá su eje de actuación en Atención Primaria, a través del médico de familia, que derivará a los internista, neumólogos y resto de especialistas que tengan que atender los síntomas que acompañan este 10% de pacientes que han sufrido una infección grave del virus y, por lo general, han tenido que pasar la UCI. Por lo tanto, no habrá unidades específicas, como se crearon en su día para enfermos de colza o positivos en VHS.