Monte la Reina podría convertirse en el primer acuartelamiento militar autosuficiente energéticamente de toda Europa. Eso, si finalmente el Gobierno se decide a impulsar el proyecto. Una fundación del Parque Tecnológico de Boecillo ha iniciado contactos con la Subdelegación de Defensa para construir unas instalaciones capaces de surtirse de manera independiente, convirtiendo así el recinto en un centro pionero y referente en materia de sostenibilidad. Para ello, se aprovecharían los recursos naturales de la zona y se aplicaría la tecnología y los materiales de construcción más innovadores, de manera que se consiga ese equilibrio que evite la huella contaminante y reduzca al mínimo el nivel de emisiones a la atmósfera.
El proyecto ha sido presentado ya al subdelegado de Defensa en Zamora, el coronel Vicente González Martín, por parte de dos representantes del equipo investigador del Centro Tecnológico CARTIF, asentado en el parque de Boecillo. “En el caso de que el acuartelamiento proyectado en Monte la Reina fuera una realidad, con el apoyo del personal técnico e investigador de CARTIF, pasaría a ser un referente nacional e internacional de sostenibilidad en el ámbito militar”, sostienen desde la fundación tecnológica afincada en la provincia de Valladolid.
Para la fabricación de energía se aprovecharían todos los recursos naturales disponibles en la zona, como el solar, el eólico y el hidráulico, y se emplearían las técnicas y los materiales de construcción más innovadores para la optimización del consumo en el camino de la excelencia, lo que permitiría crear un acuartelamiento militar autosuficiente energéticamente y con un nivel de emisiones muy reducido.
Luis Ángel Bujedo, director del Área de Sistemas de Energía, y Manuel Andrés, investigador de la División de Energía, coordinarán el estudio, que en una primera etapa se centraría en la fase de construcción de la base a las afueras de Toro, aportando ideas para un diseño del campamento energéticamente sostenible, basado en la minoración del consumo y en la producción autónoma de energía. En una segunda fase, la base podría convertirse en centro de excelencia para la difusión, formación, experimentación y exportación de soluciones energéticas y medioambientales en el ámbito de la Defensa, incluidos materiales habitualmente proyectados en las operaciones exteriores, al considerarse la zona de Monte la Reina un emplazamiento idóneo como banco de pruebas dadas sus características climáticas y orográficas.
La propuesta busca incorporar un valor añadido al proyecto de recuperación del emplazamiento de Monte la Reina a través del compromiso con la sostenibilidad global y la lucha contra unos retos climáticos cada vez más urgentes. “En línea con iniciativas, entre otras, de la Agencia Europea de Defensa (EDA), el estudio abordará el desarrollo y demostración de soluciones técnicas que habiliten un uso eficiente e inteligente de la energía en los emplazamientos militares del futuro”, explican desde el centro tecnológico.
En este sentido las oportunidades son múltiples. “Abarcando desde el diseño de edificios según estándares de consumo de energía casi nulo (ZEB – Zero Energy Buildings), la integración de sistemas de energía renovable innovadores, la monitorización y control inteligente de su operación en base a soluciones de digitalización avanzadas, hasta la planificación integral de los flujos de energía, recursos materiales y personas dentro de la vida del emplazamiento militar, promoviendo sistemas de electro-movilidad y enfoques de circularidad que contribuyan al mismo tiempo al beneficio del entorno local de la provincia”, añaden los responsables.
La primera reunión entre la Subdelegación de Defensa y CARTIF ha servido para sentar las bases de cara a una colaboración más estrecha entre la empresa y el Ministerio de Defensa que daría continuidad a líneas de trabajo en un ámbito de interés común. No obstante, la experiencia que se pudiera cosechar en el campamento militar de Monte la Reina resultaría clave al objeto de poder exportarlas hacia otros acuartelamientos de cara al futuro. Por el momento, la propuesta está encima de la mesa, pero nadie sabe qué será del proyecto, a pesar de que fue una promesa electoral formulada por el propio presidente Pedro Sánchez. A día de hoy, la recuperación de la actividad castrense en las afueras de Toro es más que una incógnita para los zamoranos.
