Todavía sin salir de la peor pandemia de la historia reciente de la humanidad, los científicos atisban en el horizonte la llegada de otros nuevos virus que pueden traer consigo otra mortífera oleada de contagios para los humanos. Esta vez con una nueva cepa de la famosa gripe aviar que ha sido capaz de infectar a humanos, el altamente patógeno H5N8. Una de las vías de expansión por el mundo es el de las aves migratorias, y de hecho este virus ya ha sido detectado en Zamora, concretamente en un ave muerta en la reserva de las Lagunas de Villafáfila.
El programa de vigilancia de la influenza aviar del Ministerio de Agricultura no detectó la enfermedad durante los años 2018 y 2019 en aves silvestre en España. Sin embargo, en la presente temporada 2020-2021, se han detectado 3 focos del virus H5N8 en aves silvestres en Cantabria, Girona y Zamora. Concretamente, el 5 de febrero de 2021, un ánsar común (Anser anser), resultó positivo tras ser localizado muerto por agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León en la Laguna Grande de Villafáfila, en la provincia de Zamora.
Los científicos chinos, George Fu Gao y Weifeng Shi han alertado recientemente en un artículo publicado en la revista Sciencie que tras el coronavirus puede llegar otra pandemia, precisamente el virus de la gripe aviar H5N8. El virus no es nuevo, ya que circula por Europa desde 2014 y ha causado brotes que han afectado a millones de aves silvestres y de corral, de acuerdo con los datos de la agencia europea dedicada al control de las enfermedades infecciosas, ECDC. El pasado 20 de febrero de 2021, Rusia informó de la infección de siete trabajadores de una granja de 900.000 gallinas ponedoras en la región de Astracán. Ninguno tuvo síntomas, aunque fue la prueba palpable de que el virus puede pasar a los humanos.
Los mencionados científicos chinos, que ayudaron a identificar el actual coronavirus consideran en su artículo de Science que “la propagación mundial de los virus de la gripe aviar H5N8 es un problema de salud pública”, y pueden producir “pandemias espantosas en humanos”. George Fu Gao es el director general del Centro Chino de Control y Prevención de Enfermedades y Weifeng Shi el director del Laboratorio de Referencia de Enfermedades Emergentes Infecciosas de las Universidades de Shandong. Ambos participaron en la identificación del nuevo coronavirus, el causante de la actual pandemia, en diciembre de 2019. Lo que temen ambos científicos es que los virus de gripe aviar, concretamente este H5N8 pueda provocar “pandemias desastrosas” en los humanos.
Según estos científicos, la rápida propagación mundial del esta cepa H5N8 y su capacidad para pasar de una especie a otra, con casos demostrados, y transmitiéndose también a las personas, le convierte en un riesgo importante tanto para la ganadería y la seguridad de la vida silvestre como para la salud pública mundial.
Los virus aviar de la gripe A que causan infección en las aves, pero pueden mutar y propagarse a los humanos son algo ya conocido de hace décadas. De hecho fue en el año 1997 la primera vez que se constató, en Hong Kong, el primer brote de gripe aviar en humanos, procedente de los pollos, a la que se llamó influenza aviar H5N1. Fue, de hecho la que posteriormente se expandiría por todo el mundo, con casos registrados han registrado casos de gripe aviar A en humanos (H5N1) en Asia, África, Europa, Indonesia, el Pacífico, Vietnam y Medio Oriente. Hubo también personas infectadas en Zamora a partir de los años 2009 y 2010 de un virus que presentaba altas tasas de mortalidad, pero que no tuvo la propagación que ahora ha conseguido el coronavirus, por lo que no llegó a convertirse en una gran pandemia.
Sin embargo, sigue abierta probabilidad de un brote mundial en humanos, que se incrementa cuanto más se disemina el virus de la gripe aviar.
El riesgo de contraer este virus es mayor para las personas que trabajan en contacto con las aves de corral, las que viajan a países donde el virus está presente, si se toca un ave infectada, se entra en un edificio con aves enfermas o muertas, donde hay basura y si se come sangre, huevos o carne crudos o a medio cocer de aves infectadas. Tanto la carne como los huevos bien cocinados evitan que se contraiga la infección.
El virus de la gripe aviar vive en el medioambiente durante períodos de tiempo prolongados. La infección se puede propagar simplemente tocando las superficies que contengan el virus. Las aves que estuvieron infectadas pueden esparcir el virus en sus heces y saliva durante 10 días.
En España existe un programa de vigilancia de la gripe aviar, encargado de evaluar la situación y tomar medidas. Por ejemplo el caso detectado en las lagunas zamoranas de Villafáfila se comunicó a la Comisión Europea y a la OIE. Además se censaron todas las explotaciones avícolas comerciales y no comerciales que estuvieran en un radio de tres y diez kilómetros, se hizo una inspección clínica de las aves de todas las explotaciones, se evaluación de las medidas de bioseguridad aplicadas en las explotaciones de aves, se intensificó la vigilancia en aves silvestres y se difundió la información sobre la situación epidemiológica.
En Zamora los municipios con especial riesgo son los situados en el entorno de las lagunas de Villafáfila, aunque también hay otras dos zonas de especial vigilancia en torno a los embalses y los Arribes. En concreto, la Orden que establece las medidas específicas de protección en relación con la influenza aviar incluye a 15 localidades de la provincia de Zamora: Cañizo, Castronuevo, Granja de Moreruela, Manganeses de la Lampreana, Revellinos, San Agustín del Pozo, San Martín de Valderaduey, Santovenia, Tapioles, Vidayanes, Villafáfila, Villalba de la Lampreana, Villárdiga, Villarrín de Campos y Villaveza del Agua.
Los 16 municipios de especial vigilancia son Carbellino, Campillo, Palazuelos de Sayago, Zafara, Castillo de Alba, Vide de Alba, Manzanal del Barco, Moraleja de Sayago, Muelas del Pan, Ricobayo, Villaflor, Roelos de Sayago, Salce, San Pedro de la Nave-Almendra, Videmala, Cibanal, Formariz y Fornillos de Fermoselle.
No obstante, en el mapa del riesgo por zonas ganaderas ninguna comarca de Zamora está en riesgo extremo. En una escala de 1 a 5, con 1 como el nivel de riesgo máximo y 5 el mínimo, solo las comarcas ganaderas con sede en Manganeses de la Lampreana y Villalpando están en nivel 3. En nivel 4 se sitúan Puebla de Sanabria, Santibáñez de Vidriales, Benavente, Alcañices y Tábara, y en nivel 5, Bermillo de Sayago, Toro, Fuentesaúco, Zamora.
El Centro de Investigación en Sanidad Animal, CISA publicó también el trabajo sobre Desarrollo de un análisis de riesgo de entrada de la Influenza Aviar altamente Patógena (IAAP) en España, destacando fundamentalmente el riesgo específico de entrada a través de aves silvestres migratorias y evaluando el impacto para los diferentes tipos de explotaciones avícolas nivel provincial. La finalidad última del estudio es facilitar al Ministerio de Agricultura una herramienta práctica para valorar el riesgo y poder enfocar los muestreos en épocas, zonas y especies concretas.
