El doctor Antonio Conde Palacios, especializado en obstetricia y ginecología, será uno de los responsables de un nuevo servicio de Recoletas Zamora, vinculado a la clínica Vida Recoletas Valladolid, que buscará ofrecer una ayuda a las familias zamoranas que quieran resolver cualquier cuestión vinculada a la medicina reproductiva.

–¿Qué causa la esterilidad femenina y cuáles son las señales de alerta que permiten detectar esta circunstancia?

–La esterilidad femenina, de forma clásica, se entiende como la ausencia de gestación tras, al menos, un año de relaciones sexuales frecuentes sin protección. Es cierto que hay personas en las que ese periodo se acorta unos seis meses, y suelen ser mujeres por encima de los 35 años o que tienen alguna patología que puede disminuir la calidad y la cantidad de sus ovocitos. Además, entre las causas, no solo influye la reserva ovárica sino también la capacidad ovulatoria, la permeabilidad tubárica y las características del órgano receptor, así como otras situaciones médicas que pueden dificultar la implantación y progresión de la gestación: inmunidad, trastornos genéticos hereditarios, hábitos dietéticos... Y no podemos olvidar a aquellas pacientes que, tras conseguir un embarazo, presentan una evolución desfavorable y entran en lo que llamamos abortos de repetición. En cuanto a los síntomas, lo más normal es que las mujeres que vengan a consulta estén sanas, aunque también vemos personas con dolores o alteraciones menstruales, que no ovulan todos los meses... Ese puede ser un signo de alarma.

–¿Qué ocurre con el factor masculino?

–El factor masculino está presente en hasta un 50% de las parejas infértiles. Por lo que una valoración estricta del varón es parte importante de nuestra labor. Independientemente, el mensaje que queremos dar a la sociedad es que el factor más determinante en el éxito de la reproducción sigue siendo la edad.

–¿A qué edad empieza a haber más problemas?

–La edad a la que la reserva y la calidad ovocitaria empiezan a verse afectadas se sitúa a partir de los 35 años. Con las mujeres que están a partir de esa franja de edad, se intenta programar una gestación si es posible y, si no, plantearle que valore la opción de una preservación ovocitaria. Hay también pacientes jóvenes que no esperan tener una reserva ovárica tan baja, que se hacen un estudio previo y que reciben la información para gestionar su futuro reproductivo.

–¿Qué ofrece Vida Recoletas, el centro de Valladolid, a las mujeres que acudan a la consulta de Zamora?

–Vida Recoletas constituye un grupo de clínicas orientadas a la reproducción. Una de las prioridades del equipo es mantenerse actualizado en todas las técnicas diagnósticas y de tratamiento, con el objetivo de facilitar el acceso a las técnicas sin que las parejas tengan que moverse de nuestra comunidad. Algunas de las cosas positivas son la individualización de los tratamientos, la profesionalidad del equipo siempre bajo la tutela del profesor Luis Tabernero, un referente en el estudio y tratamiento de la esterilidad, y el trato cercano y humano, que intenta no solo abarcar lo estrictamente médico, sino también lo psicológico. Todo ello apoyado por la mejor tecnología, con incubadores Time-Lapse de última generación, equipos láser para biopsia embrionaria, sistemas de trazabilidad automatizados... Las parejas tendrán en todo momento la sensación de que tanto su estudio, seguimiento y tratamiento es vigilado y coordinado por todo un equipo multidisciplinar, al igual que se sentirán incluidas en la toma de decisiones. Todos los casos son comentados en nuestras sesiones clínicas, siempre con la máxima privacidad y profesionalidad.

–Cada vez son más las mujeres que deciden ser madres en solitario ¿Qué les puede ofrecer Vida Recoletas?

–Somos conscientes del incremento exponencial en el número de mujeres que deciden dar el paso y convertirse en madres en solitario. Para ello disponemos de técnicas ampliamente conocidas y la posibilidad de la donación del gameto masculino desde un banco de semen propio, con la más exclusiva confidencialidad y asegurando una correcta compatibilidad y similitud con la progenitora. Una información muy demandada por estas mujeres es la posibilidad de conservar semen de donante para futuras gestaciones y así conservar la misma carga genética entre sus hijos. Esa opción existe.

–¿Qué tipo de técnicas de medicina reproductiva van a llevarse a cabo?

–En Vida Recoletas se ofertan todas las técnicas vigentes actualmente en la medicina reproductiva, lo que incluye no solo las técnicas clásicas, sino también el uso del diagnóstico genético preimplantacional para la prevención enfermedades hereditarias. También existe la posibilidad de preservar ovocitos y disponemos de un test genético, que permite a los futuros padres saber si son portadores de alguna alteración cromosómica recesiva.

–¿Cómo se traduce el vínculo de la Clínica Vida Recoletas de Valladolid con la consulta de Zamora?

–El objetivo principal de la consulta en el Hospital de Recoletas de Zamora es acercar todo un equipo multidisciplinar dedicado en exclusiva a la reproducción. Facilitamos el primer contacto, el estudio de las parejas, el seguimiento del tratamiento, el estudio exquisito de los casos y toda la evolución. Invitamos a todas las mujeres y familias que lo necesiten a acudir.