Sanidad programará la vacunación masiva de los zamoranos menores de 65 años durante la próxima semana. Así lo confirmaron este sábado fuentes de la Delegación Territorial de la Junta en una provincia que está viendo cómo el proceso ya lleva días avanzando en algunos territorios cercanos, como León, mientras aquí ni siquiera se ha anunciado todavía el lugar donde se llevará a cabo esta fase de la inmunización con AstraZeneca. De hecho, la elección del espacio “no es definitiva” aún.
Hay que recordar que la campaña de vacunación masiva con estas dosis se llevará a cabo con el grupo de personas nacidas entre 1956 y 1961, las de mayor edad que pueden recibir Astrazeneca. El proceso comenzó ayer en varios puntos de Burgos, en León o en Palencia, ya se había puesto en marcha en Segovia y arrancará el lunes en Ávila, Valladolid o Soria, gracias a las más de 50.000 vacunas llegadas el viernes. De momento, los zamoranos que están pendientes de la cuestión tendrán que esperar.
Mientras tanto, la idea de Sanidad es continuar avanzando con la inmunización de los mayores de 80 a lo largo del fin de semana, aunque los datos del jueves y el viernes no resultaron precisamente halagüeños, con poco más de 200 personas vacunadas cada día en la provincia. Así, Zamora sigue rezagada en el proceso si se comparan sus datos con los del resto de la comunidad autónoma. Hasta la fecha, se han administrado 43.276 dosis y 16.600 personas han recibido el ciclo completo; cifras ligeramente inferiores a las de Palencia o Ávila, que presentan niveles de población más bajos.
Por lo demás, la pandemia sigue sin mostrar signos de virulencia en la provincia, que acumuló once casos en las últimas 48 horas, 4 comunicados el viernes y otros 7 el sábado. Ante estos datos, la amenaza de la cuarta ola sigue apaciguada por el momento, aunque todavía no ha entrado en juego el factor Semana Santa en la evolución de los contagios notificados.
Los brotes activos también se mantienen estables en ocho, aunque Zamora sí tuvo que lamentar este viernes un fallecido por COVID en el Complejo Asistencial, lo que eleva la cifra de decesos a causa de la pandemia en las dependencias hospitalarias hasta los 418.
En cuanto a la ocupación actual de los hospitales, la situación se mantiene tranquila, nada que ver con lo que ocurría hace justo un año, en el pico de la primera ola en Zamora, cuando se acumularon 15 enfermos en la UCI y más de 100 en planta. El escenario actual sitúa a tres pacientes en la zona de críticos y a otros doce en planta, una cifra ligeramente más alta que la de jornadas anteriores, pero lejos de los números dramáticos citados previamente.
Todo ello, en un momento en el que la incidencia a 14 días supera ligeramente los 50 casos por cada 100.000 habitantes, y se sitúa en menos de 22 en la última semana. Esto quiere decir que los siete días precedentes han sido positivos para la evolución del virus en una provincia que sigue presentando las cifras más tranquilizadoras de toda la comunidad autónoma.
Por municipios, el riesgo muy alto se encuentra en Robleda-Cervantes, Palacios de Sanabria, Vega de Tera, Arcos de la Polvorosa, Villanueva de Azoague, Villafáfila, Manganeses de la Lampreana, San Vicente de la Cabeza, Rábano de Aliste, Pinilla de Toro, Casaseca de Campeán, Mayalde y Fuentesaúco, que tiñen de granate un mapa con mayoría aún de zonas libres de coronavirus.
En lo que se refiere a los núcleos principales, la incidencia de Zamora capital a 14 días se sitúa en poco más de 42 casos por cada 100.000 habitantes; en Benavente, la tasa asciende a más de 106; mientras que Toro se sitúa actualmente en 46 contagios por cada 100.000 tarjetas sanitarias.
