El estallido de la pandemia se llevó por delante tres de los seis servicios ferroviarios diarios con los que contaba la ciudad de Zamora. Con el tiempo, Renfe recuperó una de las frecuencias, pero dejó dos completamente apartadas. Entre ellas, el tren madrugador. Ha pasado un año desde que la crisis sanitaria fuera utilizada para cercenar horarios. Una cuestión que no solo ha afectado a la provincia, sino a otros territorios que han visto menguar sus posibilidades de viaje. Sin embargo, el clamor para la devolución de esos servicios, especialmente el de las siete de la mañana, se ha convertido en popular. La Diputación Provincial y el Ayuntamiento de Zamora han coincidido en que su eliminación no ha causado más que problemas y ha menguado perspectivas de futuro para no pocos conciudadanos. La unidad parece ser la única base para recuperar ese tren.

El presidente de la Diputación Provincial de Zamora, Francisco José Requejo, ha sido quien ha llevado la batuta a lo largo de los últimos meses para reclamar al Gobierno de España la devolución del tren madrugador. Un trayecto que se puso en marcha en mayo de 2018 y que, apenas dos años después, ha desaparecido del mapa sin dejar rastro. Para el líder de La Encarnación, esta frecuencia es “clave” de cara a mantener residentes en Zamora que tengan que trasladarse puntual o habitualmente a Madrid para ocupar sus puestos de trabajo. Sin embargo, las explicaciones desde la ferroviaria brillan por su ausencia y desde el Gobierno se limitan a decir que “no existe demanda suficiente”.

Cabina del tren antes de su salida de la capital. | Emilio Fraile

El Ayuntamiento de Zamora, por su parte, ha sido el último en iniciar una campaña para lograr un consenso político con el que hacer fuerza de cara a recuperar ese servicio. En la Casa de las Panaderas van más allá, de hecho, y no solo piden que vuelva el tren madrugador, sino que además lo haga con una hora de antelación. Salir a las seis de la mañana en lugar de a las siete para poder llegar con holgura a la capital del Estado. El concejal de Turismo, Christoph Strieder, ha asegurado que es importante el regreso del tren madrugador, pero también apostar por hacer el camino a la inversa. “Tenemos que ofrecer más, como ciudad y como provincia, para que negocios se puedan asentar aquí con la facilidad de tener Madrid a poco más de una hora”, ha indicado.

Las consecuencias de esta pérdida de trenes pueden ser nefastas para los intereses de la capital y la provincia. Y ahí está la razón por la que las instituciones no dejan de presionar de cara a su regreso.

Te puede interesar:

El resto de las frecuencias desaparecidas, claves para el turismo

El tren madrugador es un servicio de los zamoranos para los zamoranos. Pero la pérdida de otras frecuencias afecta de manera directa a los intereses de la provincia en la medida en que son trenes que traen visitantes. El concejal de Turismo del Ayuntamiento de Zamora, Christoph Strieder, cree que ahí está una de las claves para la recuperación económica y así lo ha trasladado en el seno de la Asociación de Ciudades AVE, de la que la capital forma parte. “Tenemos prevista una reunión técnica con Renfe para abordar cuestiones acerca del incremento de frecuencias de trenes, aunque también es interesante que nosotros trabajemos desde el otro lado para ofrecer algo más a los potenciales usuarios del servicio”, ha indicado. Las exigencias a la ferroviaria llegan tanto desde las administraciones como de otras organizaciones como la Asociación de Usuarios del AVE de Castilla y León, que desde hace meses denuncia los recortes a los que se ha visto sometido este servicio en el conjunto de la comunidad autónoma.