La obra de sustitución de las aceras de Tres Cruces ha generado polémica en la Corporación Municipal incluso antes de comenzar. El Partido Socialista considera que la intervención anunciada por el equipo de Gobierno es “un parche” que no servirá sino para tener que actuar de nuevo en un plazo corto de anualidades. El portavoz de la formación, David Gago, ha apuntado que el Ayuntamiento de Zamora “pierde una oportunidad” de abordar una iniciativa más ambiciosa y relacionada con la sostenibilidad urbana. Un asunto sobre el que existe mucha hemeroteca por parte de la Concejalía de Urbanismo, pero que está costando traducir en actuaciones reales de las que el ciudadano puede palpar y beneficiarse.

El grupo municipal del Partido Socialista ha recordado, a colación del anuncio de las obras, que hace meses elaboraron un documento con el que pretendían contribuir a una mejora sustancial de este enclave que es puerta de entrada a la ciudad desde las estaciones de autobús y tren, además de asumir su función de centro neurálgico de la capital. “Después de todo lo que se ha debatido y hablado sobre la sostenibilidad urbana, creímos que sería interesante hacer un planteamiento más ambicioso que un simple levantamiento de la acera para cambiar los adoquines”, ha señalado Gago. Por esta razón, los socialistas se reunieron “con todos los comerciantes de la calle” y presentaron ante el equipo de Gobierno una propuesta de cambio radical del actual entramado.

La iniciativa de los socialistas pasa por dar un auténtico lavado de cara a las Tres Cruces, con el soterramiento de los contenedores, el estudio de una solución verde para diferenciar la zona de tráfico de las aceras y la inclusión de un carril bici. “Echamos cuentas y, colocando el aparcamiento en batería, no solo no se perderían plazas, sino que ganaríamos dos más”, ha indicado el concejal de la oposición. Su proyecto, además, incluye la supresión de dos de los cuatro carriles de vehículos, dejando un carril para cada sentido de la marcha, de manera que el peatón fuera el auténtico protagonista.

Para David Gago, la intervención en las Tres Cruces es “una oportunidad fantástica y ampliamente demandada tanto por los comerciantes como por los vecinos de dar una solución más sostenible” al entorno. “Sin embargo, parece que no se quiere acometer reformas en profundidad; tenemos la filosofía, pero no la aplicamos”, ha expresado. “Por lo tanto, lo que va a ocurrir, es que ahora vamos a levantar toda la calle y a molestar a todo el mundo, para tener que volver a levantarlo dentro de tres o cinco años por falta de planificación”, ha indicado.

La falta de planificación es, a juicio del Partido Socialista, el problema de este tipo de actuaciones. “Es algo que hay que corregir y nosotros siempre tenemos la mano tendida para hacer una ciudad mejor; pero, para eso, es necesario debatir”, ha comentado.