Zamora ha sido escenario en el último año de concentraciones en contra de los recortes en Sanidad en el medio rural, manifestaciones para reclamar la reapertura de la hostelería y protestas por la precariedad de los trabajadores del Complejo Asistencial. Se han dejado oír en las calles los autónomos asfixiados por la crisis del coronavirus. También las familias posicionadas en contra de la denominada Ley Celaá. Se han organizado marchas contra la política del Gobierno en la gestión de la pandemia. E incluso ha habido en la capital un acto a favor de la libertad de expresión tras el encarcelamiento del rapero Pablo Hasél. La Subdelegación del Gobierno ha recibido comunicación de 86 manifestaciones y concentraciones desde que se iniciara la pandemia. Todas se han desarrollado sin polémica. Hasta que ha llegado el 8M.

El próximo lunes, coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer, se celebrarán en Zamora dos actos en la lucha por la igualdad. Uno tendrá lugar en la Plaza Mayor, donde la Asamblea Abierta de Mujeres dará lectura a un manifiesto reivindicativo contra el machismo. El otro será en la plaza de Alemania, frente al edificio de los sindicatos, donde una representación de UGT y Comisiones Obreras participará en una concentración con presencia limitada para reclamar mejoras laborales, la ruptura del techo de cristal y la eliminación de la brecha salarial. Hay ese 8 de marzo, por cierto, otra concentración comunicada a la Subdelegación del Gobierno. La convoca la Asociación Nacional de Víctimas y Afectados por Coronavirus (Anvac), una organización vinculada a Vox desde su nacimiento el pasado mes de abril. Aunque, sobre esta, no se pide suspensión.

El subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco, ha asegurado que bajo su competencia no se encuentra la autorización o prohibición de ninguna manifestación, sino que únicamente recibe la comunicación de un derecho constitucional. No obstante, el representante afirma no entender la polémica suscitada ante la celebración del Día Internacional de la Mujer. “Me extraña un poco, porque parece que el resto del año no se hacen manifestaciones ni concentraciones”, ha indicado. Para Blanco, no es tanto una cuestión de seguridad ni de salud pública, sino de fondo. “Igual es que hay colectivos que todavía no tienen las cosas claras y que no están de acuerdo en que existe una desigualdad contra la que hay que luchar”, ha afirmado a este diario.

La realidad es que, a lo largo del último año natural, han sido muchas las manifestaciones y concentraciones que han reunido a un importante número de personas en las calles de capital y provincia. Las más multitudinarias han sido las de los hosteleros y las convocadas por Vox, aunque el abanico donde elegir es amplio. Respecto al próximo 8 de marzo, cabe recordar que en Zamora tan solo se realizarán dos actos y que uno de ellos es la lectura de un manifiesto “sin concentración”, como ha señalado el subdelegado del Gobierno. El otro, anunciado ayer por los máximos responsables de UGT y CCOO en Zamora, Ángel del Carmen y Trinidad Acebes respectivamente, estará muy condicionado por las restricciones y el número de participantes se acotará al máximo, tal y como han señalado las organizaciones convocantes.

Como derecho reconocido en la Constitución, la manifestación es una herramienta a disposición del ciudadano para expresar, decir, reclamar o protestar lo que considere legítimo. Esto último es una perspectiva abstracta, pero no los datos. El pasado martes se publicaban las estadísticas del desempleo en la provincia de Zamora, con un total de 13.614 parados. De ellos, 5.979 son hombres y 7.635, mujeres. Además, una de las reivindicaciones más sonadas de este año marcado por el coronavirus es el de las mejoras de las condiciones laborales y salariales en el sector de los cuidados. A día de hoy, existen 550 personas trabajando en los servicios públicos de ayuda a domicilio por toda la provincia. De todas ellas, el 98% son mujeres. Y en materia salarial, el último informe de la Agencia Tributaria revela que los ingresos medios por año de un trabajador en la provincia de Zamora ascienden a 17.383 euros. El sueldo medio anual de los hombres es de 18.806 euros; el de las mujeres, de 15.749.

Tanto la Coordinadora Feminista como los sindicatos consideran que existen razones poderosas y más que suficientes para realizar estos actos puntuales en las calles de la capital el próximo lunes día 8 de marzo. Un Día Internacional de la Mujer marcado por las restricciones, pero en el que “hay necesidad de gritar cuál es la situación”, como defiende Trinidad Acebes.