Zamora y Ávila son las provincias de la comunidad mejor posicionadas de cara a las medidas de desescalada que tomará este lunes el Gobierno regional, ya que ocupan el primer puesto de las nueve provincias en prácticamente todos los indicadores de riesgo del coronavirus.
Son sobre todo los datos de incidencia son importantes de cara a las medidas de desescalada que se espera anuncien a partir de las 12.30 de este mediodía el vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea y la consejera de Sanidad, Verónica Casado, tras la reunión del Consejo de Gobierno extraordinario de este lunes.
Y la incidencia a 14 días está en Zamora en 66 casos, dos veces y media menos que la media de la comunidad y a 7 días en 30 casos, también menos de la mitad del conjunto de Castilla y León, aunque muy cerca de Ávila que tiene 31. La tasa de incidencia en mayores de 65 años, 43 casos por cien mil en 14 días está casi un tercio por debajo de la del conjunto de la región, mientras que a 7 días es la tercera más baja tras la de Ávila y Segovia.
También están en cifras aptas para bajar el nivel de restricciones la positividad global de las pruebas que es en Zamora la más baja de la comunidad (de cada cien test PCR o de antígenos sólo 4 dan positivo), y la trazabilidad, que está en riesgo bajo, pese a que es la segunda peor de la comunidad (de cada cien casos en 70 se puede determinar dónde se ha originado el contagio).
La ocupación hospitalaria del 7,16% no es la mejor en Zamora (es cuarta de la comunidad) pero está en nivel medio y muy cerca de la media del conjunto de la autonomía.
Y el Talón de Aquiles de Zamora y prácticamente todas las provincias de la comunidad menos Ávila es la ocupación de camas de UCI. En Zamora un 42% de los puestos de la unidad de críticos está ocupado por pacientes de coronavirus y el límite máximo para pasar de fase está en el 25%, parámetro que solo cumple la mencionada Ávila. Por lo tanto Zamora tiene a favor sobre todo los datos de incidencia y Ávila los de ocupación hospitalaria y de UCI.
Medidas agravadas
Las medidas principales que se espera que puedan tener cierto alivio son las que se tomaron como agravadas a la situación propia del nivel 4 de riesgo muy alto, es decir, la apertura en el interior de bares y restaurantes, la vuelta a la actividad de los grandes centros comerciales y la eliminación de las restricciones a la actividad de gimnasios, unos sectores que vienen reivindicando tras prácticamente dos meses de cierre, que se sumaba al que sufrieron con anterioridad.
La postura de la Junta, personalizada en Igea y Casado, sin embargo, suele ser de prudencia absoluta ante la desescalada, por el miedo que hay a que relajar las medidas puede dar pie a que el virus encuentre de nuevo un caldo de cultivo sobre el que montar una cuarta ola.
