La falta de vacunas de Moderna por segunda semana consecutiva puede comprometer el calendario de vacunación contra el coronavirus de las segundas dosis a los profesionales del Complejo Asistencial de Zamora. En una provincia, además, que está a la cola de profesionales sanitarios vacunados con la segunda dosis, tan solo 643, por detrás de Soria, que tiene 747 inmunizados y Palencia y Ávila que tienen más de 800. El resto supera el millar y Valladolid salta de las cuatro mil.

Habrá que esperar a que lleguen las vacunas de Moderna para completar las dosis del hospital si bien hay un margen de 28 a 45 días para hacerlo. En otras provincias tienen el mismo problema, ya desde al semana anterior.

La novena remesa ministerial dejará esta semana en Zamora 3.740 vacunas contra el COVID, por delante de Soria, a la que llegan 3.040 y Palencia (3.640) y por detrás del resto de la comunidad: Ávila, 4.810, Burgos, 7.580, León; 9.650, Salamanca, 7.380, Segovia, 4.810 y Valladolid, 10.150.

En concreto, de la marca Pfizer llegan a Zamora dos bandejas, con 2.340 dosis, mientras de AstraZeneca se reciben 1.400 dosis (14 cajas de cien unidades cada una).

Una de las razones por las cuales Zamora es la última en vacunar a los profesionales sanitarios es porque tiene más población que atender de otros colectivos, como las residencias. Así, en Zamora el total de personas con las dos dosis puestas es de 6.671, más que Soria, Segovia o Ávila. Entre los colectivos con el ciclo completo de vacunación destacan los mayores de las residencias, 3.289, y los trabajadores de centros socio sanitarios, 2.330. El segundo grupo son los trabajadores sanitarios, con 643, seguidos por los residentes en centros de personas con discapacidad y otros que no son de mayores, con 24, los trabajadores esenciales, 136 y 19 personas con patología de riesgo.

Si se cuentan primeras y segundas dosis, se observa cómo entre los mayores de las residencias y los trabajadores socio sanitarios están ya prácticamente todos con la primera y la segunda dosis, mientras que en el colectivo sanitario hay una gran diferencia. Así, mientras que a este colectivo se le han puesto 3.566 dosis, sólo 643 tienen el segundo ciclo completo, cuando la proporción debería ser de aproximadamente la mitad (ya que a cada persona corresponden dos dosis).

No es que en Zamora se estén haciendo las cosas peor que en otras provincias, ya que la carencia de vacunas está afectando por igual no sólo a la comunidad, sino el resto del país, sino que es difícil mantener un calendario de vacunación cuando fallan los suministros previstos. Es de esperar que a medida que pase el tiempo las llegada de vacunas sea mayor.

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