La provincia de Zamora mantiene una tasa de paro próxima al 12%. Así lo manifiestan los datos de la Encuesta de Población Activa publicada en la jornada de ayer por el Instituto Nacional de Estadística. Un documento que coloca el número de desempleados en la provincia en 8.700 al cierre del pasado año 2020 y que apunta a un descenso en el desempleo del 22% del año anterior. Estos datos contrastan con los ofrecidos por el Servicio Público de Empleo Estatal dependiente del Ministerio de Trabajo a principios del mes de enero, que situaba en más de 13.000 personas el número de parados en el territorio. La diferencia radica en el método de cálculo. Y es que, mientras que el paro muestra la cifra de demandantes de empleo que se han inscrito en el SEPE, la EPA tiene en cuenta otro tipo de variables más amplias al tratarse de una encuesta de publicación trimestral.

Sea como fuere, los datos ofrecidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística muestran una reducción del desempleo de 1.600 personas en el último trimestre del año, probablemente causado por el periodo de contratación navideña. En términos interanuales, la estadística indica que 2.500 personas han salido de la población inactiva a lo largo de este tiempo, lo que supone un 22% del total. Todo ello, coloca la tasa de desempleo en la provincia de Zamora en un 11,5%, incluyendo a un total de 8.700 personas a la finalización del pasado año 2020. Aún así, Zamora sigue situándose entre las cinco provincias de Castilla y León con un mayor porcentaje de desempleo. En concreto, la tasa de paro más elevada la registra Ávila con un 16,04 por ciento, por delante de Salamanca (15,75 por ciento), León (12,07 por ciento) seguida de Zamora (11,47 por ciento) y Valladolid (11,35 por ciento).

EPA Castilla y León

Mientras tanto, el número de activos se incrementó en Ávila y Zamora y cayó en el resto. En la provincia abulense la subida fue del 1,76 por ciento (1.300), lo que deja la cifra total en 74.900, mientras que en Zamora el incremento fue de 200 personas (+0,26 por ciento), hasta las 75.700. A nivel autonómico, el número de desempleados en Castilla y León subió un 1,36 por ciento en el cuarto trimestre del pasado año, con 1.700 parados más, en comparación con el mismo trimestre de 2020, lo que deja la cifra de parados en 128.300. En lo que respecta al cómputo nacional, el mercado laboral notó los estragos de la COVID en 2020 al registrar una subida del paro de 527.900 personas, lo que supone un 16,5% más que en 2019, y un retroceso de la ocupación de 622.600 trabajadores (-3,1%), según los mismos datos.

CEOE CREE QUE LA SALIDA DE LA CRISIS ES “IMPOSIBLE SIN APOYO DIRECTO A LAS EMPRESAS”

CEOE Castilla y León ha señalado que la salida de la crisis se atisba “prácticamente imposible” y no se recuperará el mercado laboral “mientras las empresas no reciban ayudas directas, y se adopten medidas orientadas a salvaguardar la competitividad”. Los datos de la EPA del cuarto trimestre suponen para CEOE Castilla y León “el cierre de un año absolutamente negativo en la creación de empleo” motivada por la actual crisis sanitaria. “Las cifras constatan que el incremento de la tasa de paro, la subida del número de desempleados y el descenso de ocupados ha sido una constante a lo largo del pasado año 2020, como también lo ha sido la constante desaparición del número de empresas cotizantes a la Seguridad Social en la región”, han señalado desde la patronal.

Por su parte, los sindicatos, como CCOO, han señalado que los ERTE y las ayudas a autónomos “siguen sujetando, en gran medida, el mercado de trabajo” y han insistido en que la Junta “debe comprender y tomar nota para apoyar con presupuestos los programas que mantienen el empleo, con ayudas complementarias y subvenciones a las personas que trabajan en régimen de autónomos”