La llegada de familiares durante las fiestas navideñas supuso en varios puntos de la provincia un incremento de población de hasta el quince por ciento, según la estadística experimental que elabora el Instituto Nacional de Estadística con los datos de los teléfonos móviles de los ciudadanos. Durante prácticamente todo el mes de diciembre se encontraron en la provincia de Zamora más ciudadanos de los que suelen residir, lo que indica que hubo personas que no cumplieron las restricciones a la movilidad impuestas por la administración autonómica.
Así las cosas la zona sur de la capital —barrios de Cabañales, San Frontis o Pinilla— y pueblos como Morales del Vino, El Perdigón o Entrala incrementaron su población, siempre según el INE, en más de un 14,5% durante los días centrales de las fiestas navideñas. Las zonas de La Lana, Pantoja, Las Viñas o Vista Alegre vieron incrementada su población un cinco por ciento justo el día antes de la Nochebuena, primero en el que la movilidad entre regiones estuvo permitida. Candelaria y Los Bloques mantuvieron su población estable antes de Nochebuena, al igual que sucedió con San José Obrero o La Villarina. En la zona norte de la capital, donde aparecen pueblos como Andavías, La Hiniesta, Cubillos o Montamarta, la población aumentó cerca de un cinco por ciento.
Importante incremento de población el que se detectó también en la comarca de Sanabria. En Puebla y en los municipios de su entorno residen habitualmente, según el INE, 5.334 personas. Durante el 23 de diciembre la zona experimentó un incremento de población de 701 personas, lo que se traduce en un alza de más del trece por ciento según los datos difundidos por el INE. Villalpando y los municipios de su entorno experimentaron también un notable incremento de la población con el primer día de levantamiento parcial de las restricciones. Las 4.853 personas que viven habitualmente en la zona se multiplicaron , lo que dejó un incremento de 398 personas o, lo que es lo mismo, un incremento de más del ocho por ciento del censo. En Santa Cristina de la Polvorosa y los municipios del entorno de Benavente la población aumentó hasta un diez por ciento en los días previos a la Navidad, lo que se traduce en una variación de más de 520 personas según indican los datos del INE.
Los datos muestran que el levantamiento parcial del cierre perimetral de la comunidad se tradujo, en el caso de Zamora, más en la llegada de viajeros que en la salida de residentes hacia otras zonas del país. Así, Toro se suma a la lista de municipios que incrementaron la presencia de ciudadanos en sus calles antes de la Navidad. La zona experimentó un crecimiento de población de más de trescientas personas, lo que se traduce en un cuatro por ciento.
Un análisis más general del mapa que elabora el INE permite comprobar que los grandes núcleos de población de la región y del país fueron durante las fiestas navideñas “emisores” de visitantes, personas que llegaron fundamentalmente al entorno rural de Zamora y de otras provincias. Así, el 23 de diciembre se constató una pérdida de residentes en las ciudades de Salamanca, León o Valladolid, que llegaron a perder porcentajes importantes de su cifra habitual de vecinos en beneficio de otras zonas, vecinos que han vuelto después de las fiestas.
Zamora se encuentra en el grupo de pequeñas capitales de provincia que ganaron población en Navidad, algo poco habitual en otras zonas. En la misma situación están las ciudades de Soria, Palencia, Ávila o Segovia, que también vieron regresar durante las navidades a muchos familiares de personas que residen habitualmente en estas ciudades.
