Las localidades de Candelera (Ávila), Covarrubias (Burgos), Villanueva de Omaña (León), Aguilar de Campoo (Palencia), Miranda del Castañar (Salamanca), Riaza (Segovia), Casarejos (Soria), Bustillo de Chaves (Valladolid) y Cerecinos de Campos (Zamora) son las seleccionadas para formar parte de “9 miradas a Castilla y León”, la exposición que se inauguró esta semana en el Espacio Rampa del Museo Etnográfico de Castilla y León con imágenes en grandes dimensiones realizadas por el arquitecto Carlos Flores entre finales de los años 60 y los años 70.

Una de las imágenes, tomada en Miranda del Castañar. | Nico Rodríguez

Se trata solo una pequeña muestra del ingente material que atesoró este conquense, quien, a través de su cámara, se especializó en plasmar en blanco y negro la arquitectura y forma de vida de los pueblos españoles de esa época que, poco a poco, se iban quedando desiertos por la emigración a las ciudades.

En esta exposición se pueden ver algunos ejemplos, desde las ruinas del palomar de Cerecinos de Campos, fotografiado en 1972, hasta el pastor que guía a sus bueyes entre los soportales de la localidad palentina de Aguilar de Campoo. La impresionante arquitectura salmantina rural también queda bien reflejada en la imagen tomada en 1974 en Miranda del Castañar, donde se acompaña de una familia a la puerta de su vivienda, con una madre con su bebé en brazos y un par de chiquillos jugando.

Y es que el retrato de personas de este mundo que comenzaba a despoblarse ya en esas décadas tampoco fue indiferente al objetivo de Flores. En esta exposición se pueden ver escenas rurales cotidianas, desde ropa tendida a la puerta de una vivienda en Casarejos (Soria) hasta la animada charla de mujeres mientras cosían, todas vecinas de Candelera (Ávila).

El objetivo de los años setenta

El fondo de imágenes de Carlos Flores está desde 2002 en manos del Museo Etnográfico de Castilla y León, cuyo personal ha realizado un arduo trabajo para inventariar y estabilizar los más de 1.500 negativos de la colección. El siguiente paso fue poner en marcha una página web donde poder disfrutar de todas estas fotografías (museo-etnografico.com/fotografia.php).

En esta página se aglutinan 2.400 imágenes de Castilla y León a través de las que se recorren 243 municipios de esta comunidad. El resto pertenecen a otros puntos de España. Y es que, menos Canarias, el arquitecto y fotógrafo recorrió toda la geografía nacional.

Como señala el bibliotecario y documentalista del museo, Emilio Ruiz Trueba, estas fotografías “son un fiel reflejo de aquella España en proceso de cambio” y destaca del autor el que fuera capaz “no solo de captar esa decadencia arquitectónica, sino que además supo reflejar magistralmente formas de vida que ya no son más que un recuerdo. Hoy que la España vaciada se rebela a su suerte, las imágenes tomadas por Carlos Flores en aquellos años resultan ser de ferviente actualidad”.

En la biografía del autor en la web del Etnográfico se describe a Carlos Flores como “uno de los grandes teóricos de la arquitectura. Crítico, observador, caminante documentalista, y todo un excéntrico de la docencia de arquitectura que se impartía en la Escuela de Arquitectura de Madrid de los años 40”.

En sus viajes, produjo un banco documental de miles de fotografías y escritos “que paso a paso conformaría la obra maestra enciclopédica Arquitectura Popular Española. Esta obra, comenzada a publicar en 1973, estaría compuesta por cinco extensos tomos, de una magnífica calidad gráfica y de contenidos, ordenados por franjas de territorio, en una delimitación condicionada por climatologías y rasgos geoculturales. Los distintos volúmenes se articulan en torno al material fotográfico producido por el autor, dándole una cualidad visual y compositiva superlativa, que enriquece aún más una postura de revisión historiográfica, y un análisis arquitectónico desde la sociología y la vanguardia”, se explica. Y un claro ejemplo de todo esto se puede comprobar con la selección de fotografías realizada para esta exposición en el Etnográfico.

La muestra visual se puede visitar de manera gratuita hasta el próximo 7 de marzo, en horario de miércoles a domingo, de 10.00 a 14.00 horas por la mañana y de 17.00 a 20.00 horas por la tarde.