“Sus obras destilan serenidad, sencillez y paz”. Con estas palabras describía el nuevo obispo de Zamora, Fernando Valera, su primera impresión al descubrir la colección de Hipólito Pérez Calvo. “Sus piezas no son dolorosas, sino gloriosas, representando a un Dios accesible”, añadía en su intervención durante la inauguración de la nueva exposición del Museo Diocesano de Zamora, que ha abierto las puertas de sus instalaciones en la iglesia de Santo Tomé para rendir un particular homenaje a la obra religiosa de este autor zamorano, con una recopilación de cerca de veinte piezas que recrean a la perfección su recorrido por esta temática durante toda su trayectoria artística.

Bocetos de Cristo y la Virgen María, piezas singulares de la muestra. | J. L. F.

Fue el delegado diocesano para el Patrimonio y Cultura, José Ángel Rivera de las Heras, el encargado de hacer una semblanza de este artista zamorano, nacido en Berciano de Vidriales en 1936. A la inauguración acudió parte de su familia, que ha cedido algunas de las obras que se expondrán en estos próximos meses. Junto a ellas también hay préstamos de algunas cofradías de la Semana Santa zamorana, como la de Jesús del Vía Crucis o la Real Cofradía de Nuestra Madre de las Angustias. De ellas se han seleccionado algunos tableros en relieve de dos mesas procesionales.

Detalle de la mesa de Nuestra Madre de las Angustias. | J. L. F.

El temprano genio de este zamorano con la madera se descubre en una de las primeras obras de la colección, un relieve de santa Lucía que realizó con tan solo catorce años y que ahora se exhibe en la iglesia de su pueblo natal. La excelencia de sus dibujos y moldeado en barro llevó al maestro y cura de su pueblo a instar al a familia a que promoviera su formación artística. De este modo, en 1951 se trasladaba a la capital para ingresar en la Escuela de Artes y Oficios, donde se decantó por la madera y la talla decorativa. Un año después pasaría a la Escuela de Artes y Oficios de Madrid, donde recibió también clases particulares de Tomás García y Justiniano Casas, sus primeros maestros.

Maqueta en barro del paso de La Tercera Palabra, para León. | J. L. F.

De vuelta a Zamora, compaginó la docencia en el instituto María de Molina y la Escuela Universitaria de Profesorado de EGB con el trabajo en su estudio taller. También fue director del Museo Provincial de Bellas Artes antes de trasladarse a la vecina Salamanca, donde formó parte de la plantilla que puso en marcha la facultad de Bellas Artes.

En cuanto a esta muestra, las últimas piezas son quizá las más singulares, pues se trata de maquetas realizadas en barro de obras conocidas del artista, con las que se pone de relieve su capacidad para recoger sentimientos y expresiones en los rostros de Jesucristo, la Virgen o san Juan. La última pieza es un boceto en barro de un famoso paso de la Semana Santa leonesa, como La Tercera Palabra de la Cofradía de las Siete Palabras. Además de en Zamora y en León, Pérez Calvo dejó su impronta en la Semana Santa de La Bañeza, Salamanca y Toro. También tiene varios ejemplos de escultura urbana en Zamora y Tábara, además de Salamanca, La Bañeza y Tordesillas.

La viuda y un hijo de Hipólito Pérez Calvo, en la muestra. | J. L. F.

Por otra parte, Rivera de la Heras anunció que la exposición se completará próximamente con una última pieza, una maqueta del paso de Las tres Marías y San Juan, que puede verse cada Semana Santa en la procesión de la Cofradía de Jesús Nazareno, y que pertenece a una colección privada de una familia que reside fuera de Zamora, por lo que su cesión temporal se ha visto retrasada unos días.

La exposición estará abierta durante los seis primeros meses de este año 2021 —como es habitual, se realizan dos muestras al año en este museo— y se podrá visitar de lunes a sábado en horario de 10.00 a 14.00 horas por la mañana y de 17.00 a 20.00 horas por la tarde. Los domingos y festivos solo tendrá horario de mañana y la entrada finaliza quince minutos antes del cierre.