Ana Ruiz Casado, oncóloga zamorana del hospital madrileño Puerta de Hierro de Madrid ha reclamado la inclusión de la terapia de ejercicio físico en las prestaciones de la sanidad para pacientes con cáncer, debido a los beneficios que procura tanto en la prevención como durante el tratamiento e incluso la curación de la enfermedad.

Ruiz Casado ha visitado la sede de Azayca, la Asociación Zamorana de Ayuda contra el Cáncer, donde medio centenar de personas han realizado la actividad de ejercicio terapéutico, de las cuales 18 permanecen en activo, bajo la batuta del fisioterapeuta David Rivera. El ejercicio aeróbico durante 300 minutos a la semana, con dos sesiones de fuerza y estiramientos y otras dos de flexibilidad es lo recomendado, según indicó la oncóloga.

El ejercicio físico parece ser un factor protector frente a prácticamente todos los tipos de cáncer, excepto el melanoma cuyo riesgo se puede incrementar al permanecer más tiempo al aire libre, ayuda asimismo durante el tratamiento porque disminuye los efectos secundarios y mejora también tanto la supervivencia como las posibilidades de curación.

La oncóloga zamorana cree que una vez se pase la pandemia COVID es previsible un incremento de los diagnósticos de cáncer, debido a que durante estos meses ha disminuido notablemente la incidencia de los tumores, probablemente por los reparos de los ciudadanos para acudir al médico ante síntomas que antes se habrían consultado al doctor, lo mismo que ha sucedido con otras patologías, como los infartos. Sin embargo, las consultas oncológicas, asegura, han funcionado con normalidad y entre los pacientes ha habido menos temor que en otras especialidades a acudir a las citas.

Con respecto a la vacuna, Ruiz Casado explicó que en principio no está contraindicada para los pacientes con cáncer, aunque en principio podría alcanzar menor inmunidad que en otro tipo de pacientes.

Por otra parte, la presidenta de Azayca, Pilar de la Higuera, que estuvo acompañada por el vicepresidente de la Diputación Jesús María Prada y los pacientes que acuden a la terapia de ejercicio físico, indicó que diez usuarios de la provincia utilizan en estos momentos el transporte social, una iniciativa que se puso en marcha en colaboración con los taxistas y la ayuda de Caja Rural para ayudar a los pacientes que no tienen otra forma de desplazarse al hospital para los tratamientos.