Zamora es románico y también es río Duero. Pero hay una tercera pata inexplorada cuya situación va a cambiar con el año nuevo. La muralla debe erigirse en epicentro del turismo que llegue a la capital. Un atractivo escondido durante décadas que ha sido recuperado de la oscuridad y merece ser aprovechado. El Ayuntamiento lo tiene claro. Por eso, después del barro de las expropiaciones, llegará el embellecimiento del espacio. El deseado proyecto de ajardinamiento de la avenida de la Feria será una realidad y su andadura arrancará en los próximos meses. Mientras tanto, se seguirán buscando inmuebles que tapen la fortificación en zonas como la del Sillón de la Reina y se abordará, a largo plazo, la posibilidad de reorganizar todo el entorno para conseguir un gran paseo peatonal alrededor de los lienzos.

Los derribos llegarán en el futuro al entorno de la Cuesta del Mercadillo

El proyecto de liberación de la muralla es el que más ha avanzado desde que Francisco Guarido es alcalde de la capital zamorana. Después de cinco años, varias expropiaciones y algunos derribos, el regidor municipal defiende que hay que doblar la apuesta para poner en liza un auténtico valor “abandonado” durante demasiados años. “En los próximos días vamos a acometer el derribo del número 37 de la avenida de la Feria. El número 39 se encuentra a falta de resolución para echarlo abajo, el 41 también está adjudicado y del 43 al 49 ya está todo expropiado y pagado, por lo que solo resta hacer los proyectos de derribo y ejecutarlos, previsiblemente, en el segundo semestre del año 2021, junto al número 4 de la Bajada de San Martín”, ha señalado el alcalde.

Las expropiaciones llegarán a la Cuesta del Mercadillo, bajo la muralla. | E. F.

Mientras todo esto se produce, el Ayuntamiento de Zamora trabajará en la licitación de la primera fase del ajardinamiento de la zona, que comprendería desde el primer edificio derribado en la Feria, el número 11, hasta la Bajada de San Martín. “Se trata de un proyecto de pavimentación con pequeños jardines y paseos peatonales”, ha indicado Francisco Guarido. Un espacio que, sin embargo, quedará interrumpido por el colector que afloró tras uno de los derribos. “Patrimonio nos ha dicho que hay que mantener el colector. Eso tiene sus pros y sus contras, pero no es discutible, nos obligan”, ha indicado. Tratando de hacer de la debilidad una virtud, el alcalde encuentra un nuevo punto de vista sobre el asunto. “Nos rompe el paseo, pero tiene el atractivo de ser una infraestructura de saneamiento de Segundo Viloria; es un colector amplio, grande, que puede servir de atractivo”, ha comentado.

El anhelo a largo plazo es hablar con Fomento para ganar espacio en la Feria

Y el colofón a toda esta previsión es la intención del Ayuntamiento de Zamora de ampliar al máximo los espacios visibles de la muralla, aunque siempre desde abajo. Por eso, el año próximo se trabajará también en un nuevo plan de expropiaciones que llegará hasta el Sillón de la Reina. “Situados en la Cuesta del Mercadillo, hay dos edificaciones que tapan la muralla tanto a izquierda como a derecha y eso tiene que quedar expropiado el año que viene”, ha desvelado el regidor municipal.

Cuando esto se ejecute, será el momento de abordar la segunda fase del ajardinamiento, que irá desde el parque de San Martín hasta Trascastillo. Y una vez finalizado todo eso, en un horizonte temporal amplio, la ambición municipal se multiplica. “Queremos hablar con Fomento para ampliar el ajardinamiento sobre algún carril de la Feria; dos carriles para cada sentido, con aparcamientos, es demasiado. Y eso, a la muralla, le vendría muy bien”, ha analizado.