Zamora es la última provincia de Castilla y León —junto a Soria— en unirse al proyecto educativo STEM Talent Girl, puesto en marcha desde Burgos por la Fundación ASTI, en colaboración con la Junta de Castilla y León. Su director, Roberto Ranz, analiza la importancia de las asignaturas STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics o en español Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) para el futuro profesional de los estudiantes de Secundaria y subraya la necesidad de que las niñas se interesen por estas materias de cara a sus carreras universitarias. Desde la fundación que dirige se ha puesto como meta conseguir el aumento de las vocaciones femeninas en estas ramas, con la ayuda de mentoras, mujeres que ya están teniendo éxito en este terreno.

–¿Cómo nace el proyecto STEM Talent Girl?

–Se trata de una iniciativa puesta en marcha por la Fundación ASTI, en colaboración con la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta de Castilla y León. El proyecto comenzó hace cinco años en Burgos como un piloto y fruto del acuerdo marco entre ambas instituciones se ha desarrollado ya e implantado en todas las provincias de Castilla y León, puesto que este curso ya cumplimos el despliegue en Zamora y Soria. 

–¿Cuál es el objetivo de este plan?

–La misión de este proyecto es educar, inspirar y empoderar a la próxima generación de mujeres líderes en ciencia y tecnología, con el objetivo de fomentar la presencia femenina en las áreas de ciencia y tecnología, las que se conocen como áreas STEM.

–¿Es tan necesaria es apuesta concreta por el talento femenino?

–En España, al igual que sucede en Europa y en Estados Unidos, se ha producido un descenso creciente de la matriculación tanto de alumnos como de alumnas en las carreras de tecnología, pero este porcentaje es especialmente muy significativo en el caso de las niñas. Podemos hablar, por tanto, de una brecha de género en el sector tecnológico. Actualmente, encontramos grados universitarios y también ciclos formativos de grado superior donde la presencia de la mujer no llega ni siquiera al 7%. Es el caso de la mayoría de los ciclos formativos que tienen un componente tecnológico y en aquellas carreras y grados con más carácter tecnológico, como la matemática, la física y todas las ingenierías. 

–¿No son carreras atrayentes para las estudiantes?

–Las niñas habitualmente se inclinan por una formación de carácter más humanista, social o de carácter biosanitario, como Medicina o Farmacia. Pero el sector tecnológico, que es el que más empleo va a crear en los próximos años, fruto de la transformación digital y la cuarta revolución industrial, es donde la mujer no acaba de incorporarse. De ahí la importancia de despertar este interés en las niñas y, si así lo desean, poder optar por grados STEM.

"Hay que despertar el interés de las niñas por el sector tecnológico"

–¿Dónde radica la importancia de este empuje?

–Nos parece especialmente relevante esta apuesta sobre todo en las zonas de nuestra comunidad que tienen más dificultades de población, puesto que va a ser, con toda seguridad, la tecnología y el talento digital el que va a permitir el desarrollo de estas áreas rurales, como puede ser el caso de Zamora. El emprendimiento, la tecnología y el talento digital son variables fundamentales para el desarrollo y para poder fijar población en estos territorios.

–Aparte de otras sedes en Madrid y Santander, la Fundación ASTI cuenta con once emplazamientos en total, los últimos en Soria y Zamora. ¿Qué conlleva la implantación en toda Castilla y León?

–En primer lugar, supone crear una gran red o un gran ecosistema de empresas e instituciones que colaboran con nosotros para el desarrollo de este programa que acompaña a niñas desde 3º y 4º de Secundaria en una primera fase. En la segunda, que se implantará en Zamora el curso que viene, denominada Mentoring Women, las destinatarias son niñas de 1º y 2º de Bachillerato. Por último, hay una tercera fase que se llama Real World, destinada a alumnas universitarias. Para todas ellas necesitamos una red muy importante de empresas e instituciones que mentoricen a las alumnas, que creen espacios donde se puedan desarrollar actividades. También supone que Castilla y León se convierta en la comunidad de referencia en España en desarrollo de programas para talento en femenino. Por primera vez en España una comunidad autónoma como Castilla y León implementa en todas sus provincias un programa estratégico de desarrollo de fomento de vocación científica y tecnológica especialmente en niñas.

–¿Qué respuesta está teniendo hasta el momento?

–Contamos ya con más de cincuenta empresas que nos acompañan y ayudan para que el proyecto también sea factible en cada una de las provincias. Ahí también significa que para que podamos despegar el proyecto en Zamora vamos a necesitar mentoras, empresas donde las niñas puedan hacer las visitas, las sesiones de mentoring o los talleres. Es un proyecto que acelera o activa la red de empresas, el tejido industrial de la propia ciudad, porque va a poner en contacto a alumnas con las empresas del sector industrial de Zamora.

–¿Cómo se está implantando en Zamora?

–Las primeras receptoras para nuestra primera fase son alumnas de 3º y 4º de Secundaria. Se ha distribuido la información gracias a la colaboración de la Dirección Provincial de Educación de Zamora y de la delegada de la Junta a los colegios públicos y concertados de la ciudad. En noviembre comienzan las actividades, que básicamente van a ser, en primer lugar, una masterclass una vez al mes en Zamora, abierta tanto a las alumnas del programa como a sus familias y público en general. Serán impartidas por mujeres expertas en ciencia y tecnología y el objetivo es que las niñas puedan acercarse a una persona de referencia en el sector tecnológico y científico que puedan enriquecer su conocimiento y también que tengan una referencia y vean que es posible tener carreras brillantes en estos ámbitos, además de resolver sus dudas. Esta es una parte de sensibilización y apertura ciudadana, porque están abiertos a toda la comunidad.

"Trataremos de empoderar a la próxima generación de mujeres como líderes en ciencia"

–¿Qué más oferta existe?

–Las alumnas van a poder realizar sesiones por la tarde en las que estarán en empresas de Zamora, acompañadas por una mentora, para que puedan conocer cuál es el entorno real de las profesiones científicas y tecnológicas o de emprendimiento en contextos reales. Así, pueden ver cuáles son las posibilidades de empleo, de orientación académica y profesional y también comprobar que lo que están estudiando está vinculado con su futuro profesional y entornos reales de trabajo. En tercer lugar, va a haber talleres científicos y tecnológicos, donde las niñas van a poder en primera persona experimentar con nuevas tecnologías emergentes, como pueden ser las aplicaciones móviles o la robótica o introducción a la programación. Ahí se pueden aplicar conocimientos tecnológicos en contextos reales. 

–¿Existen también encuentros con alumnas de toda la comunidad?

–Realizamos encuentros donde puedan conectarse para encontrar mesas sectoriales donde se habla de los diversos sectores económicos de la comunidad, como automoción, energía, alimentación, farma, emprendimiento o tecnología. Siempre verán ahí mujeres que hablan de su experiencia profesional en empresas de primer nivel. Es una actividad que está abierta mediante la web.

–¿En qué consiste el programa Mentoring Women?

–Será para alumnas de Bachillerato y aquí las chicas van a tener una mentora con la que van a poder reunirse de forma online una vez al mes y desarrollar proyectos de investigación. Contamos con una plataforma creada por la universidad Isabel I que permite que tanto alumnas como familias accedan a los contenidos y a la programación y calendario de actividades, para tener además una comunicación y contacto entre ellas.

–Alumnas mentorizadas por otras mujeres, conferencias de profesionales mujeres… ¿Es importante esa figura femenina para las niñas?

–Sí, porque los estudios internacionales que se han realizado sobre este tema señalan que la variable que más impacto tiene en las niñas es el “mentoring”, la presencia de referentes en las cuales ellas pueden visualizar su futuro y también ver una persona de referencia que es real para su futuro académico y profesional. Esta es una parte esencial del proyecto, por eso la importancia de que en Zamora podamos contar con empresas que aporten estas mentoras y que las niñas puedan tener este contacto. Por tanto, hago una llamada a las empresas para aquellas mujeres que trabajan en contextos profesionales que pueden ser de ciencia, tecnología o emprendimiento, para que colaboren con el proyecto aportando mentoras y también a todas aquellas empresas de Zamora que quieran abrir sus puertas a que estas niñas conozcan sus instalaciones y puedan ver cómo es el mundo real del empleo en el momento presente.

"Somos referente en un programa estratégico de fomento de vocación científica"

–¿Cómo se financia este proyecto?

–El programa es totalmente gratuito, está financiado por la Junta de Castilla y León y no tendrá ningún coste para las familias. En este contexto actual de pandemia todas las actividades se realizan con las debidas medidas de protección.

–¿Las materias STEM son parte esencial de futuro profesional?

–Actualmente solo en Europa quedan vacantes un millón de empleos en este ámbito y aproximadamente en España nuestros cálculos son que faltan cerca de 500.000 personas para áreas de programación, robótica, análisis o ciberseguridad. Por tanto, el talento digital en las áreas STEM son la principal fuente de creación de empleo en los próximos años. Vemos también cuáles son las líneas esenciales como país que tenemos, donde el tema digital es esencial, también en Castilla y León. Eso significa que las niñas que así lo deseen van a encontrar posibilidades de crecimiento profesional y de un empleo de calidad. Y que también es un entorno divertido, creativo y con gran impacto social. La tecnología, lo hemos visto ahora con la pandemia, es la que ha sido capaz de resolver los problemas que tenemos en la sociedad actual, así que también las niñas pueden ver que van a poder cambiar el mundo e impactar en el bienestar de las personas si optan por estas disciplinas.

–El programa está desarrollándose desde 2017. ¿Cuál ha sido la evolución de respuesta de esta iniciativa, que sería un salto al vacío en ese momento?

–Comenzamos en Burgos con el proyecto piloto y fue clave en su crecimiento la apuesta de la Junta de Castilla y León, porque eso nos permitió crecer ya en el primer año, llegando a hacer un escalado a Valladolid. En el tercer año ya fuimos capaces de llegar a Segovia, Salamanca y Ávila y en este tercer año por fin completamos Castilla y León. También hemos crecido en Madrid y en Cantabria y ahora mismo nuestra idea es seguir creciendo como proyecto, llegando a otras comunidades de España e incluso un crecimiento internacional, que es el siguiente reto que tenemos con algunos proyectos nuevos.