A partir de hoy los zamoranos no podrán consumir en las barras de los bares, no podrán fumar en las terrazas o veladores y no podrán juntarse en grupos de más de seis personas salvo en un improbable supuesto de que todos sean convivientes. Las nuevas normas anti COVID de la Junta, aprobadas en el Consejo de Gobierno del jueves y anunciadas hace dos días por el vicepresidente Igea, están ya en vigor después de su publicación en el Bocyl de ayer.

La normativa que aparece en el boletín regional deja más restricciones de las que en principio podrían esperarse para la hostelería de la comunidad. Se reduce también el aforo, que no podrá superar el 75% en el caso de locales de hasta 40 clientes y que tendrá que ser menor del 50% en el resto de los establecimientos. Se cierran las barras, pero tampoco se podrá consumir de pie en el interior de los locales. Solo en mesa o agrupación de mesas. En todo caso, tanto en el interior de los locales como en las terrazas al aire libre deberá garantizarse una distancia mínima entre mesas o agrupaciones de mesas de 1,5 metros, con un máximo de seis personas por mesa o agrupación de ellas. La mesa o agrupación de mesas que se utilicen para este fin deberán ser acordes al número de personas, permitiendo que se respete la distancia mínima de seguridad interpersonal.

Sobre el tabaco, pocas novedades a mayores de las anunciadas el jueves. No se podrá fumar en la vía pública o en espacios al aire libre cuando no se pueda respetar una distancia entre personas de al menos dos metros, algo que no añade grandes novedades con respecto a las prohibiciones anteriores. Sí es novedoso que, independientemente de la distancia, no se podrá fumar en terrazas o similares. Ni tabaco, ni pipas de agua, cachimbas, cigarrillos electrónicos, “vapeadores” y demás aparatos.

Por lo demás, la participación en agrupaciones de personas para el desarrollo de cualquier actividad o evento de carácter familiar o social, tanto en la vía pública como en espacios públicos y privados, se reducirá a un número máximo de seis personas, salvo que se trate de convivientes y excepto en el caso de actividades laborales.

Por lo demás, los ayuntamientos deberán establecer controles de acceso a los cementerios de toda la provincia entre los días 24 de octubre de 2020 y 8 de noviembre, según las normas que acaba de dictar la Junta de Castilla y León en previsión de la alta afluencia de visitantes a los camposantos con motivo de la festividad de Todos los Santos que se celebra el 1 de noviembre.

El aforo se limitará al 50% de ocupación “garantizando el mantenimiento de la distancia interpersonal. El aforo se calculará sobre el espacio libre de construcciones.