Dar un paso más y ampliar la atención a los zamoranos con más dificultades. Este es el objetivo del Área Vital Asistencial (AVA), que a partir del próximo lunes ofrecerá un servicio complementario al cerca de centenar de usuarios de la “Cocina Solidaria”, puesta en marcha por la Fundación Caja Rural de Zamora y la Asociación de Empresarios Zamoranos de Panadería (Asezpan), el pasado mes de julio.

La nueva iniciativa atenderá necesidades básicas como el control de medicación o la realización de trámites burocráticos, gracias a la colaboración con los colegios de farmacéuticos y de enfermeros de Zamora. “Hemos detectado, a través de los trabajadores sociales, que determinadas personas, sobre todo con minusvalías o dependientes, tienen problemas para hacer algunas cosas y para eso surge este nuevo servicio”, explica Feliciano Ferrero, de la Fundación Caja Rural.

Además de la labor asistencial, la finalidad de esta iniciativa es “transmitir a estas personas que no están solas y facilitar un sistema presencial para echarles una mano”, explica Ferrero, de la Fundación Caja Rural.

Las 22 asociaciones de vecinos de la capital serán las encargadas de canalizar las solicitudes para recibir este servicio, que será atendido por un equipo formado por dos profesionales visitadores, que serán a la vez evaluadores y monitores de acompañamiento. Se trata, “de brindar una ayuda más en algo tan vital como el comer”, según destaca Carlos García, de Asezpan y añade que “Zamora tiene que cuidar a los zamoranos”.

Entre los servicios que atenderá el Área Vital Asistencial se encuentra el acompañamiento a las personas que lo necesiten al centro hospitalario o de salud y el apoyo en la resolución de trámites como la solicitud de la renta mínima garantizada o el bono social o de telefónica. En todo caso, Carlos García aclara que la iniciativa no persigue interferir con la labor que ya prestan otros organismos sociales, sino que “se trata de atender a las personas que no están en ningún sitio”. García pone de ejemplo a personas en sillas de ruedas o que usan andadores y que tienen dificultades para desplazarse y pedir ayudas como el bono de electricidad, que supone un ahorro del 40% de la factura mensual. “Vamos a acompañarles y a apoyarles en todo lo necesario para que no pierdan estas ayudas”, según destaca.

El Área Vital Asistencial complementa el servicio de la Cocina Solidaria, que cada día reparte cerca de un centenar de comidas entre las personas más vulnerables en colaboración con otros organismos como el Banco de Alimentos.