Atentos a la pantalla del ordenador, Javier Garduño y su compañero Israel García saltaron de sus asientos en cuanto vieron la imagen del vino de la bodega de Fermoselle con el que participaban. Era la gala internacional de los Premios Pentawards de diseño —emitida de forma online debido a las restricciones por el COVID-19— y el jurado acababa de elegir el producto con el que se presentaba este estudio en la categoría “Fine Wines”, algo así como vinos de lujo. “No sabíamos si habíamos ganado la plata o el bronce, solo empezamos a celebrarlo”, recuerda Garduño.

Finalmente ha sido un meritorio tercer puesto el logrado en esta edición, en la que competían con estudios de Italia, Francia y Portugal. “Estamos contentísimos, pero no hemos adivinado nada en nuestras quinielas, creíamos que iban a la ganar los italianos y el oro se lo han dado a otro”, reconoce el zamorano, cuyo trabajo ha sido muy bien valorado por un jurado experto de diferentes países. “Si gente de este nivel te da esta palmadita en la espalda es que estamos en buena senda”, agradece.

La sensación de ganar un Pentawards no es nueva para Garduño, ya que en 2017 su estudio se llevó la plata, también por el etiquetado de una botella de vino. “En esta especialidad ya somos un referente a nivel nacional en el sector. No nos gusta encasillarnos, pero es cierto que el packaging es nuestro fuerte, con varios premios ya tanto nacionales como internacionales”, confirma Garduño, que ya tiene en su agenda alguna charla al respecto.

También como en 2017, el diseñador espera que este nuevo reconocimiento internacional le reporte clientes de otros países. “Tras el confinamiento están entrándonos trabajos de Nueva York o México”, agradece desde su estudio de La Hiniesta.

“Ya tenemos la plata y acabamos de conseguir el bronce, así que ahora no nos queda más remedio que luchar algún año por el oro. Tenemos que lograr todos los metales”, bromea para finalizar.No por ser la segunda vez que consigue hacerse con uno de los premios Pentawards —los galardones internacionales más prestigiosos de diseño— le ha hecho menos ilusión al zamorano Javier Garduño, quien celebra con su compañero Israel García este nuevo reconocimiento y espera que le reporte nuevos proyectos internacionales para seguir creciendo desde su pequeño estudio en La Hiniesta.