Lo ha vuelto a hacer y ha terminado en la cárcel, de donde acababa de salir, esta vez acusado de un delito de tenencia y distribución de pornografía infantil. El zamorano de 40 años utilizó las redes sociales para intentar captar a niñas a partir de 9 años, “a poder ser con unos kilos de más”, para abusar de ellas sexualmente, según la denuncia la Policía Nacional que lo detuvo en Zamora. Su ultima condena por exhibicionismo y provocación sexual, no ha impedido a este residente en Almendra del Pan, de iniciales O.M.M., continuar con su actividad pedófila y entrar en contacto con una vecina de Zaragoza, buscaba niñas de de entre 9 y 10 años. La niña, sin embargo, resultó ser realmente una mujer mayor de edad que, tras ganarse su confianza y comprobar que tenía material pedófilo, le denunció a la Policía en Zaragoza. En base a esas pruebas, el zamorano, con numerosos antecedentes policiales por acoso sexual y provocación sexual, está imputado por un delito de tenencia y distribución de pornografía infantil.
Los agentes localizaron conversaciones a través de una conocida plataforma de mensajería instantánea que apuntaba también a una posible actividad de corrupción de menores y producción de material pornográfico con menores de edad. La Policía se incautó en esta operación, en la que participaron agentes de la Comisaría de Zamora, de diverso material informático, con miles de archivos con fotografías y vídeos de carácter pedófilo y un disco duro externo con partición oculta encriptada, tras efectuar un registro en su domicilio. La denunciante aportó las conversaciones que había mantenido con el hombre, investigación que el Grupo de Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional en Zaragoza inició en enero de 2019, en la que se analizó minuciosamente el contenido y más de 5.000 conexiones de IP del ordenador que había usado el presunto pederasta, al que se logró identificar a pesar de la multitud de datos falsos que había aportado a la denunciante. El investigado se jactaba en esas conversaciones de haber burlado la actuación policial con ocasión de una anterior detención y registro en su domicilio porque el material pornográfico infantil lo tenía guardado fuera de su vivienda, abundante material de pornografía infantil. En esta ocasión, para impedir que la policía le localizara y detuviera, daba instrucciones a la destinataria de sus mensajes para que destruyera de forma segura los archivos pedófilos. Residía de forma intermitente entre Barcelona y Almendra del Pan, localidad a la que se desplazaba con periodicidad, según pudieron averiguar los agentes del Grupo de Tecnológicos, que se desplazaron a la localidad zamorana con la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría de Zamora, donde le detuvieron. La investigación sirvió, asimismo, para desmantelar una plantación indoor de marihuana que estaba creando con 150 macetas fertilizadas, lámparas y estufas preparadas
