La Asociación de Diabéticos de Zamora (Adiza) presta atención a unos 400 zamoranos que padecen esta dolencia con especial preocupación desde que irrumpió la pandemia del coronavirus, ante la que los más de 13.000 zamoranos que sufren esta enfermedad son “muy vulnerables, un paciente diabético puede entrar en la UCI y no salir”, subraya Eusebio Díez Pinilla, presidente de la organización en la provincia.

El zamorano, recién nombrado tesorero de la Federación de Castilla y León, insta a los afectados por esta dolencia a contactar con la Asociación en Zamora e inscribirse para beneficiarse del constante contacto que mantienen con la Consejería de Educación, la de Sanidad o la de Servicios Sociales para facilitar la vida a los diabéticos y abordar, especialmente, “todo lo que concierne a gente mayor, de altísimo riesgo”. Desde la Federación autonómica se trabaja para que la Junta de Castilla y León “tenga en cuenta al diabético” como esa población de mayor vulnerabilidad frente al COVID-19.

Adiza, que volverá a abrir su sede en Zamora el día 11 de septiembre, “con todo esterilizado” y “a pesar de estar “muy condicionados por la pandemia”, dispone de servicios sanitarios gratuitos para beneficiar a sus socios, y tiene “línea directa con un endocrino y un pediatra del Hospital Virgen de la Concha”, explica Díez Pinilla.

Entre las funciones de la Asociación está “el seguimiento de los socios para ayudarles con las medidas de seguridad frente el virus”. A partir del día 11, intentarán hacer reuniones con muy pocas personas, para prevenir contagios, y desarrollar talleres con todas las medidas de seguridad “para enseñar a los socios a alimentarse y cuidarse ante la pandemia porque hay mucha información, pero, a la vez, la gente no lo tiene claro”, declara Díez Pinilla. Las intervenciones se desarrollarán en su local de la avenida Requejo 24, entreportales 3 y 4, donde disponen de un amplio espacio, con salas cedidas por el Ayuntamiento de Zamora. Ademas, tiene en proyecto organizar actividades para cubrir el tiempo de ocio cuando la pandemia lo permita. De momento, se han programado “caminatas virtuales” que sustituyen a las que se venían realizando con presencia física, esenciales para mantener la enfermedad a raya, junto con la alimentación. El representante del colectivo de diabéticos de Zamora hace especial incidencia en el reto que ha supuesto para la organización gestionar los recursos tras la irrupción del coronavirus desde “diferentes frentes”, con la comunicación virtual en el centro de las intervenciones con los socios, además de la atención continuada tanto a sus usuarios como “a todo diabético que venga desde cualquier punto de la provincia”. Está previsto entregar más mascarillas a los socios de Zamora, estas de hasta 25 lavados.