“Mi manera de sentir”. Es el nombre que da título al espectáculo que presenta, este domingo 30 de agosto, la escuela de baile de Carmen Ledesma, en la plaza de la Catedral de Zamora, a las 20.30 horas de la tarde. Será uno de los últimos actos de la programación del Verano Cultural 2020, que se ha desarrollado con éxito a pesar de la pandemia del COVID-19. Carmen Ledesma, acompañada por sus alumnas y tres músicos, presentarán una función protagonizada por la danza española y el flamenco, del que se tocarán prácticamente todos los palos.

En esta ocasión, los artistas se organizarán en agrupaciones más pequeñas de lo habitual, algo ante lo cual no siempre ha sido fácil adaptarse, tampoco a la hora de ensayar. Al final, se ha optado por “preparar el espectáculo en grupos reducidos, aunque es cierto que la afluencia en la escuela siempre baja en verano, en comparación con la gente que viene en invierno”, explica Carmen Ledesma. La docente y sus alumnas “tocarán muchos palos de flamenco, como soleá, soleá por bulerías, alegrías o tangos”, agrega. Las participantes, de entre 17 y 28 años de edad, se organizarán en función del palo que representan, de la misma manera que han dado sus clases hasta ahora, para evitar las aglomeraciones.

La actuación del domingo “será un espectáculo de flamenco puro y duro, acompañado por una base musical en directo, puesto que no hay nada grabado”, indica Ledesma. De esta forma, las bailarinas cuentan con el apoyo del guitarrista Nano Serrano, la cantaora Dalila Salazar y el percusionista Ramón Bermúdez (Monsi). Entre todos los participantes, suman un total de 14 personas, acompañadas por los técnicos que pondrán todo su esfuerzo para que sea un fin de tarde perfecto.

Carmen Ledesma llega a la plaza de la Catedral después de haber actuado, el pasado 2 de agosto, en el Teatro Ramos Carrión. La bailarina, que ya se ha presentado antes en el escenario de este domingo, destaca el espacio como “un marco muy bonito que otros años hemos llenado con 2.000 personas, aunque en esta ocasión, el aforo es reducido”.

La artista afronta la oportunidad de actuar el domingo “con mucha ilusión, porque llevo sin trabajar desde marzo y a mí me gusta mi profesión y me gusta crear cosas nuevas; el parón ha sido duro pero siempre he estado en contacto con las niñas”, relata. Su intención es comenzar el nuevo curso en octubre y empezar con los preparativos este septiembre, eso sí, con menos personas por grupo.