España y Portugal tendrán una sensibilidad especial con la zona transfronteriza a la hora de aplicar los planes de recuperación tras la pandemia, todavía vigente, de coronavirus. Así lo acordaron ayer ambos países en Zamora y así se rubricará de forma oficial el próximo dos de octubre, en Guarda — Portugal— durante la próxima cumbre bilateral entre ambos gobiernos. La decisión de orientar a la frontera parte de la estrategia de recuperación forma parte de la Estrategia de Desarrollo Transfronterizo en la que España y Portugal han trabajado, primero de forma telemática y después de forma presencial, durante los últimos meses. El último encuentro se celebró ayer en Zamora y estuvo presidido por Elena Cebrián, secretaria general para el Reto Demográfico del Gobierno de España, y por Isabel Ferreira, secretaria de Estado de Valorización del Interior del Ministerio de Cohesión Territorial del Gobierno de Portugal.
"Debemos hacer de La Raya un lugar atractivo para vivir, para trabajar y para invertir en nuevos proyectos"
El documento que se acabó de perfilar durante la jornada de ayer avanza en el compromiso de ambos países, recogido en el Memorando de Entendimiento firmado hace dos años en la XXX Cumbre Hispano-Portuguesa, por el que se comprometen a definir e implantar medidas que aseguren la sostenibilidad futura de los territorios de la frontera, “convirtiéndolos en lugares atractivos para vivir, trabajar e invertir”. Tras la aprobación del documento en la cumbre del próximo mes de octubre los dos países comenzarán la tarea de identificar las medidas que puedan adoptarse en el corto plazo y su implantación a través de actuaciones concretas. El documento en cuestión “quiere dar una respuesta inclusiva orientada al desarrollo territorial, la generación de oportunidades y el desarrollo de proyectos personales, profesionales y familiares —especialmente para mujeres y jóvenes— y garantizar la calidad de vida de las personas que viven en el ámbito transfronterizo, tanto en áreas urbanas como rurales”, apuntan desde el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
La Estrategia se convierte en el marco de actuación que permitirá articular de forma eficaz los planes de recuperación tras el COVID19 y orientar la inversión hacia el espacio transfronterizo entre España y Portugal, coordinando las actuaciones de ambos países con “el objetivo común de una Europa verde y digital, más próspera, sostenible e igualitaria”. En el actual contexto de lucha contra la pandemia, la voluntad de ambos países por impulsar la cooperación transfronteriza “es un ejemplo de apoyo territorial estratégico en el marco de la Unión Europea”.
El documento sobre el que se ha trabajado en Zamora incorpora las aportaciones recibidas desde las Administraciones Públicas y las agrupaciones territoriales concernidas y con competencias en estos territorios de frontera, que han ayudado a ajustar su contenido a la realidad de los territorios afectados.
En España, el ámbito de aplicación de la Estrategia abarca un área de 86.561 kilómetros cuadrados —el 17% de la superficie del país— y un total de 1.231 municipios de las provincias de Badajoz, Cáceres, Ourense, Pontevedra, Salamanca y Zamora, donde habitan 3.342.554 personas. Por lo que respecta a Portugal, la superficie afectada es de 57.138 kilómetros cuadrados —casi el 62% de la superficie del país— y el número de freguesías es de 1.551 donde viven 1.672.046 habitantes. En conjunto, más de cinco millones de personas.
El plan tiene un horizonte de diez años, aunque se desarrollará “poco a poco”
El documento que ayer se acabó de perfilar en el Parador de Zamora entre responsables del Gobierno español y del Ejecutivo luso tiene un horizonte de ejecución de diez años. Es decir, las medidas que en él se contemplan deberán estar puestas en marcha, como muy tarde, antes del ejercicio 2030. Sin embargo, conscientes de que los horizontes tan lejanos difuminan el impacto real de este tipo de acuerdos, Elena Cebrián apostó por recorrer “hitos concretos a corto plazo”. “Debemos ir trabajando continuamente”, apuntó la secretaria general para el Reto Demográfico. En este sentido, “hemos creado un marco de trabajo a través de un documento estratégico” que evaluará estas cuestiones. Por su parte, Isabel Ferreira destacó el “gran ejemplo de cooperación transfronteriza” dado por los dos Gobiernos con reuniones de este tipo y abogó por aprovechar el “potencial intrínseco, la cultura, el patrimonio para crear dinámicas asociadas a la generación de empleo.
