Sin un perfil determinado, 85 familias zamoranas y mayores o personas afectadas por ERTES o que viven solas se benefician de una comida caliente al día, medio kilo para el primer plato y medio para el segundo, alimentos elaborados por profesionales y controlados por un nutricionista que trabaja para la Cocina Solidaria.

Las asociaciones de vecinos son las encargadas de localizar a las personas necesitadas y de a canalizar las solicitudes, que pasan por la trabajadora social de la Cocina Solidaria para evitar duplicidades con las ayudas de otras onegés o asociaciones.

Desde la FAVE se insta a las asociaciones de vecinos a incorporarse esta iniciativa promovida por la Fundación Caja Rural y por Asezpan, que pretenden llegar a repartir 15.000 a final de año. Por el momento, están acogidas laa asociaciones de Pinilla, Alviar, San Isidro, San Lázaro, Casco Antiguo y Pantoja.

Reportaje: un plato generoso.