El tercer brote COVID de la provincia de Zamora desde que se levantó el estado de alarma, y primero en la capital, saltaba ayer con la detección de cuatro infectados y la investigación de 25 contactos, aunque la Junta lo considera “controlado”. El positivo de una joven activó el protocolo de rastreo que a fecha de ayer había localizado a otros tres positivos entre los amigos de la chica, si bien las encuestas epidemiológicas no se limitan al entorno social, sino también al familiar y laboral, informó la Dirección General de Salud Pública de la Junta de Castilla y León en un comunicado.

El Sistema de Vigilancia Epidemiológica, que desarrolla Atención Primaria en coordinación con la sección de epidemiología del Servicio Territorial de Sanidad, está realizando el seguimiento y rastreo de los posibles contactos para que se les haga las correspondientes pruebas. Hasta el momento, se están realizando los estudios de contactos a 25 personas.

La situación del brote se encuentra controlada, “si bien tanto los positivos como los contactos deberán mantener las medidas de aislamiento domiciliario y las derivadas de la normativa sanitaria”.

La Junta de Castilla y León “apela a la responsabilidad individual y colectiva de los ciudadanos, cumpliendo las medidas básicas de distancia social, higiene de manos y uso obligatorio, con carácter general, de la mascarilla en vías públicas, ámbitos urbanos al aire libre y espacios cerrados de uso o abiertos al público, con el fin de evitar situaciones que pudieran suponer riesgo de contagios y rebrotes de la enfermedad”.

Las personas que, por causa fundadas de enfermedad, dificultad respiratoria o alteraciones de conducta, no puedan hacer ese uso obligatorio de la mascarilla han de portar una declaración responsable firmada al respecto, ya sea por sí mismos o por sus tutores legales, sin perjuicio de las responsabilidades que pudieran exigirse a causa de posibles inexactitudes de esa declaración responsable. “Entre todos, con la solidaridad y la colaboración ciudadanas y el esfuerzo y el compromiso de los profesionales sanitarios, la actual situación provocada por la COVID-19 será superada, pero para ello es fundamental cumplir las recomendaciones sociales y sanitarias de autoridades nacionales, autonómicas, provinciales y locales”. A cierre de esta edición, la Delegación de la Junta no había informado de más novedades.

Continúa la evolución al alza de la pandemia, aunque a menor ritmo

A la espera de que los casos que apunta en nuevo brote se refleje en las estadísticas oficiales, la pandemia continúa evolucionando en la provincia de Zamora, tras sumar ayer tres nuevos casos y elevar en total a 1.074. Son tres más que ayer, una cifra que no se corresponde ni con los cuatro casos del brote de Zamora ni con los dos que suman las zonas básicas de salud, que se explica por lo que los técnicos llaman “decalaje”, es decir el diferente horario en el que recopilan los datos para las distintas estadísticas. Al final son los datos globales, los que anotan los 1.074 casos en Zamora, 697 confirmados con pruebas PCR, los que permiten seguir la evolución de la pandemia. Y estos indican que tras los fuertes incrementos del pasado fin de semana la situación tiende a estabilizarse, siempre con permiso de los brotes que en un momento determinado pueden multiplicar la cifra de infectados. Ocurre en otras provincias como Burgos, que contabilizó ayer 31 casos nuevos y la jornada precedente 86, o Valladolid, con 22 casos que se sumaban a los 33 del día anterior. En ambos casos de trata de provincias con brotes activos muy importantes.

De momento Zamora se estaba salvando de los brotes, pero al final han llegado, y de momento se está librando de un brote importante, que también puede llegar a poco que se relajen las costumbres del distanciamiento social y el uso de mascarillas.

Por lo demás, los casos están dando más trabajo a los rastreadores, pero no parecen reflejarse todavía en el hospital, que continúa con tres ingresados en planta y ninguno en la UCI. Las altas hospitalarias se mantienen oficialmente en 366, así como la cifra de fallecidos, afortunadamente sin ninguna novedad desde haces muchas semanas, estancada en 92. Las residencias también mantiene una posición estable, aunque la estadística no ha reflejado el positivo hallado en un geriátrico que provocó el segundo brote de Zamora.  

Toro y Santa Elena incrementan las cifras en las zonas básicas de salud de la provincia

La actualización de los datos de las zonas básicas de salud que a diario proporciona la Consejería de Sanidad anota un incremento de casos en dos zonas básicas de salud de la provincia. Una de ellas es la de Toro, que contaba el día anterior con dos casos y pasa a tres, con lo cual cambia también el color y pasa de verde a amarillo por superar los 2,5 casos por diez mil habitantes. La otra zona que aumenta sus casos es Santa Elena, que pasa de los cuatro casos de la jornada anterior a cinco y permanece, claro, en amarillo, que es el parámetro que se usa para determinar que se está produciendo un contagio de casos con el que hay que tener mucha precaución. Además están en amarillo las zonas básicas de salud de Zamora Sur y Guareña, que llevan días ya estancadas en dos casos. Lo mismo ocurre con las zonas de Sanabria y Carballeda, con un caso cada una y sin nuevos positivos, por lo que en breve podrían regresar la color verde. Los cuatro positivos de Benavente Norte se corresponden con el brote de Manganses de la Polvorosa que, de momento, parece no haber dado nuevos sustos. Además hay un caso en Aliste, zona básica que se mantiene en verde. No hay ninguna zona roja, es decir, con transmisión comunitaria.