La soprano madrileña Sonia de Munck llega a Zamora después de haber actuado en los principales teatros del país. La artista protagoniza la obra “Il segreto de Susanna”, una mujer transgresora que actúa fuera de los cánones de su época, dentro del Festival LittleOpera.

—¿Qué podrán ver los asistentes a la ópera “Il segreto de Susanna”?

—Podrán ver una comedia de enredos, con una música posromántica que es una belleza. Es muy divertida, con una puesta en escena convencional, muy bonita y que van a disfrutar mucho. Ha sido hecha con mucho amor y sacándole todo el partido para que se pueda escuchar bien la música y que toda esa escena acompañe y sirva de hilo conductor.

—¿Es la primera vez que canta en público tras la cuarentena?

—Tuve un recital, pero fue prácticamente entre amigos, así que sí es la primera vez. Con la pandemia ha habido un parón tremendo, con lo cual el festival está haciendo un gran esfuerzo y los artistas lo valoramos mucho porque se necesita volver a los escenarios y el contacto con el público.

—En el múndo de la ópera ha afectado especialmente.

—Sí. Las cancelaciones que yo he tenido siempre han sido con grandes orquestas y grandes coros, con lo cual no se han podido hacer. Esta ópera tiene el formato ideal porque somos un actor, un barítono y una soprano en el escenario, junto al pianista, y es perfecta para adaptarla a estos tiempos de COVID-19. Ha habido unas variaciones en la escena para acomodarlo y mantener distancias de seguridad, pero no interfieren en la trama y el espectador podrá entenderla.

—¿Cómo se ha preparado?

—Este confinamiento, que a todos nos ha cambiado, ha hecho que reflexionemos sobre las prioridades. Los artistas estábamos muy afectados por todo lo que ocurría, y nuestra vida se ha ceñido a lo que solemos hacer en los momentos en los que no hay actividad teatral o estamos estudiando. Quizá para nosotros era más fácil estar encerrados en casa porque llevamos nuestro instrumento encima. Ha sido cuestión de buscar el equilibrio y hacer el mismo trabajo de siempre. Ya habíamos hecho esta obra hace dos años y se trata de volver a memorizarla y poner la voz, un trabajo que se puede hacer personalmente. También he estado ya con los compañeros y ha sido un momento atípico, pero muy bonito y gratificante por poder volver a cantar, algo por lo que estoy muy agradecida al festival.

—¿Había estado antes en Zamora?

—Sí, para ver el festival porque hace dos años cantó mi marido. Me entusiasmó el Teatro y la propia Zamora me impresionó en todos los sentidos. Estuvimos disfrutando de la ciudad y espero poder hacerlo esta vez, aun con las restricciones que tenemos.

—¿Por qué deben los zamoranos asistir a un espectáculo de ópera como el que protagoniza?

—Creo que tanto esta obra como “Le violoneux” son una combinación perfecta, y el público va a poder disfrutar de actuaciones diferentes, ligeras en cuanto a temática, aunque “Il segreto de Susanna” tiene gran complejidad como cantante y músico. Esta obra le entusiasma a cualquier conocedor de la ópera, y hacerla permite mirar hacia adelante en el mundo de las artes.