En miércoles, el día de la Liga de Campeones, cuando los grandes equipos firman grandes logros, el Zamora CF certificó matemáticamente su clasificación para disputar la próxima temporada la nueva liga Primera RFEF, categoría que pasará a ser la tercera del fútbol español y que relegará a una Segunda B en la que los rojiblancos han pasado de ser una “cenicienta” a convertirse en “el lobo feroz”.

El empate firmado el domingo pasado frente al Compostela (1-1) dejaba al conjunto de Movilla muy cerca de un logro histórico. El punto dejaba una única posibilidad de no transformar el trabajo en proeza: un cuádruple empate a puntos entre Zamora CF, Unionistas, Racing de Ferrol y Celta B. Una carambola que ayer se hizo añicos tras la derrota de los ferrolanos ante el Coruxo por 3-1.

El conjunto racinguista era la gran amenaza. Contaba con dos partidos pendientes y podía llegar a la última jornada, aplazada por su situación competitiva, con la posibilidad de firmar tablas con Unionistas y que estas valieran a ambos conjuntos. Sin embargo, el bloque de Cristóbal Parralo pagó la inactividad de días pasados ante un Coruxo que aprovechó la indecisión de su rival en la mañana de ayer para sumar una victoria más a su casillero.

El equipo vigués se adelantó en el minuto 9 gracias a un libre indirecto dentro del área que transformó Rivera. Una ventaja que incrementó en el minuto 36 Diego Rivas en un fugaz taque del Coruxo.

El Racing de Ferrol no se vino abajo y pudo recortar ocasiones en múltiples ocasiones de un partido en el que el Coruxo tuvo también muchas ocasiones para sentenciar, cosa que hizo desde el punto de penalti por mediación de Alex Ares en el minuto 77. Un tanto que haría estéril el 3-1 de Nathan con el que se cerraría el encuentro.

Con este resultado, el esfuerzo y trabajo del Zamora CF obtenía su recompensa. El cuádruple empate era imposible y, con ello, los rojiblancos podían ya festejar su inclusión en la Primera RFEF, cosa que hicieron de manera discreta en una jornada en la que, quizá, solo el técnico David Movilla dedicó algo de tiempo a pensar en el futuro. Un futuro inmediato que pasa por buscar acabar como líderes el día 28 en la visita a Riazor; y otro aún más ilusionante si cabe, a medio plazo, que es tratar de lograr un ascenso histórico a Segunda División.

La fase de ascenso, esa que involucrará también a Cultural Leonesa, Real Valladolid B y Burgos, está en la mente de todo aficionado pero, desde el club, esa competición arrancará a partir de hoy. Puede que de mañana, pues toda la familia rojiblanca entiende la importancia y necesidad de celebrar lo hecho hasta la fecha.

El Zamora CF festeja unido su éxito ante el Compostela. José Luis Fernández

Así lo confirmó ayer César Villafañe que, tras confirmarse la promoción del Zamora CF a la Primera RFEF, aseguró que “A día de hoy hay que celebrar lo que se ha conseguido. Ni vamos a pensar en el mañana hoy ni puede que en dos días. Creo que hay que celebrar las cosas que se consiguen y tendemos una semana para preparar el último partido de liga. Iremos paso a paso, pero lo primero es no pensar más allá y disfrutar de este logro hoy”, aseguraba el director deportivo rojiblanco.

Según comentaba el responsable de la parcela deportiva del club, este éxito del Zamora CF es “un logro de todos, del primero al último”. “Nosotros no nos cansamos de decir que estos es una familia, y es así. Esta es una conquista colectiva, en la que ha sumado del primero al último del club y, sin ninguna de esas personas, quizá no se habría logrado”.

Villafañe destacó que el pasado fin de semana “no se celebró nada porque el salto aún no era matemático” y había que esperar, más teniendo en cuenta que “en este grupo no te regalan nada” y es, en su opinión, “uno de los más difíciles de la categoría”. De ahí la importancia de lo hecho por un Zamora CF que da a su salto a la Primera RFEF el valor del crecimiento. “Para nosotros este éxito significa seguir creciendo. Nos hace seguir confiando y viendo que la senda que iniciamos cuando nos enrolamos en este proyecto va por donde nos habíamos marcado. Es un pasito más, y debemos estar contentos y celebrarlo”, analizó, apostillando: “es obligación celebrarlo porque en el fútbol se viven más cosas malas que buenas”.

Una alegría que, por desgracia, ayer afición y equipo no pudieron compartir en el Ruta de la Plata, dado que el salto dependía de terceros. Circunstancia que tienen en cuenta desde el Zamora CF, desde el que reconocen que si bien “todavía no se ha pensando nada”, les encantaría “celebrarlo con todos los zamoranos”.

“Es difícil, debido a las restricciones y todo lo que puedes y no puedes hacer. Veremos en estos días cómo podemos hacer partícipe a la afición, porque el año pasado tampoco pudieron celebrar el ascenso y creo que estamos en un momento en que estas pequeñas alegrías hay que compartirlas y disfrutarlas”, comentó Villafañe, que quiso dedicar este éxito a los aficionados: “va por ellos, porque al final todos defendemos este escudo, sus valores y el sentimiento que tiene detrás. Ojalá hayamos podido poner nuestro granito de arena para haber hecho un poco mejor su dia y darles una alegría tras estos meses tan duros para casi todos”.

El Zamora CF festeja su empate con el Compostela José Luis Fernández