El Zamora CF vuelve a la carga tras un fin de semana de descanso, que el entrenador deja claro que “no sé si viene mal o bien, aceptamos lo que nos viene. Ha venido bien para echarnos de menos, que es mejor que echarse de más”. En cuanto a los objetivos que pueden tener a su alcance en el Zamora, aseguró que “en ningún momento se ha verbalizado” la opción de la Segunda B PRO. “Nosotros tenemos retos importantes en este partido, pero no estamos conectados con la clasificación. Tenemos dos retos: ganar tres partidos seguidos, y otro es ganar cuatro seguidos fuera de casa, algo que solo ha hecho un equipo de 102 de la Segunda B. Esos son retos mayúsculos como para andar distrayéndonos con otras cuestiones clasificatorias”.

En cuanto a si entiende la ilusión y euforia de la afición por la buena temporada, y por el hecho poder estar el próximo curso en la Primera División RFEF, solo comentó que “no sé en qué energía vibra el entorno, aunque me lo imagino. Llevo tiempo aquí y me imagino la situación. Sé que aquí se pasa de la euforia al drama, y la misma narrativa excesiva que pueda haber ahora mismo será en el otro extremo en cuanto haya un resultado negativo. Solo me preocupa la energía en la que vibra el equipo que está estable. Cuando el equipo tropiece se volverá a esa inestabilidad externa, que no interna porque aquí solo nos preocupa llegar al máximo. Estamos lejos de todo argumentario poco concreto y alejado de la realidad”.

En cuanto a los cambios experimentados por el Salamanca UDS desde que tienen como entrenador a Lolo Escobar y los fichajes de invierno, David Movilla hizo balance y expuso si se tuvieran en cuenta solo las jornadas con el nuevo técnico “irían en cuarta posición”., a un punto del tercero. “A nivel individual yo no tenía dudas, pero se ha potenciado más ahora. Sobre este asunto recordó que han fichado “jugadores top” en varias posiciones que han subido el nivel global del equipo.

En este encuentro, además, el Zamora estará en el estadio en el que a juicio de Movilla más influye el público, aunque no estarán solos. Alrededor de medio millar de aficionados zamoranos ya tiene su entrada para el derbi regional de este domingo a las cinco de la tarde.