El Zamora CF pudo ayer reconciliarse con el buen juego y, sobre todo, con los resultados positivos. El equipo goleó sin miramientos a un inocente San José que apenas opuso resistencia a unos locales que sentenciaron el encuentro muy rápido. Sobre todo en la primera parte los de Miguel Losada arrollaron y dejaron todo decidido para volver a sumar de tres en tres, algo que no había sucedido en los cuatro últimos choques. Este resultado tan positivo solo quedó empañado por la lesión de Diego Ortiz que tuvo que abandonar el terreno de juego por una rotura fibrilar, cuyo alcance se conocerá en las próximas horas. Este resultado permite a los de Losada subir hasta el sexto puesto, a expensas de que termine la jornada. El partido quedó muy rápido encarrilado y es que en el minuto 13 de encuentro los rojiblancos ya lo tenían prácticamente sentenciado con un 3-0 a favor, y eso que la primera gran opción del encuentro fue para el San José en un uno contra uno de Valer, que ganó la espalda a la defensa, que Miguel resolvió a tiempo. La respuesta a esta llegada de los sorianos fue rápida y letal con una contra que culminó Revidiego que a los tres minutos ya ponía a los de Losada por delante. El empuje zamorano no se frenó, más bien todo lo contrario, se multiplicó sobre un San José, recién ascendido, que se estaba viendo superado por el juego zamorano pero que intentaba mantenerse vivo, algo que iba a ser complicado. En dos nuevas llegadas, primero Caramelo con el pecho y después de nuevo Revidiego, dejaban todo visto para sentencia cuando no se había cumplido el primer cuarto de hora y ponían un 3-0 que ya dejaba los tres puntos prácticamente en la mano.

No se puede decir que los de San José no mostraran orgullo pero a duras penas plantaban cara a los de Losada que estaban dominando y disfrutando de nuevo del fútbol, algo que necesitaban sobre todo los jugadores para levantar la moral, más allá de la posición en la tabla.

Con este panorama y pesar de ver que para ellos el encuentro ya era casi imposible de remontar, los sorianos consiguieron en una llegada puntual recortar distancias pero a partir de ahí las embestidas zamoranas fueron continuas aunque la mayoría fallidas y solo Caramelo volvió a acertar en el primer acto en un disparo que dio en la escuadra antes de colarse al fondo de la red con el que se puso el 4-1 con el que se llegó al tiempo de asueto aunque el marcador pudo ser más abultado.

El guion fue el mismo con la reanudación y tras una primera intentona de Caramelo que tuvo el quinto en una vaselina a puerta vacía el que acertó fue Raly Cabral cuyo disparo desde la frontal sí subió al marcador. El Zamora CF se estaba dando un festín de goles ante un inocente e inofensivo San José. Todo parecía estar saliendo a pedir de boca hasta que tras una hora de encuentro Diego Ortiz se veía obligado a pedir el cambio lesionado tras notar un pinchazo en el isquio, por lo que parece ser una rotura fibrilar. En las próximas horas se someterá a una ecografía para conocer el alcance real. A pesar de este golpe en la moral, el dominio local siguió y aunque ya no era el vendaval de la primera parte, Revi pudo cerrar su triplete en la recta final y en esta ocasión con un buen remate de cabeza que significó el definitivo 6-1. Ahora el equipo debe recuperar fuerzas cuanto antes y pensar en Almazán, al que visitarán el miércoles a las 17.00 horas, mientras que el domingo regresarán al Ruta de la Plata para cerrar una más que intensa semana.