Lo importante era ganar y, con menos brillo del deseado, es lo que hizo ayer el Zamora CF ante el Atlético Bembibre. Un gol de penalti convertido por Edu Ruiz (el segundo que les pitan esta temporada) fue suficiente para sumar los tres puntos ante un Atlético Bembibre trabajador pero al que con el paso de los minutos se le fueron acabando las fuerzas frente a unos locales que sí tuvieron opciones para sentenciar pero no estuvieron acertados.

Con este triunfo el equipo quiere dejar atrás un mal mes de febrero pero además este resultado positivo les permite volver a ampliar su renta respecto a sus principales perseguidores, con los que compiten por el título de campeón. De este modo los rojiblancos, que siguen en lo más alto de la clasificación con 65 puntos, aventajan en cinco más golaveraje a la Gimnástica Segoviana, que vuelve a la segunda plaza tras ganar al Uxama (2-0), mientras que el Palencia, que perdió ante el Ciudad Rodrigo (2-1) se sitúa a siete. La cuarta plaza continúa siendo para La Bañeza, que suma 52 puntos, y que se jugará la posición de fase de ascenso la próxima semana con el GCE Villaralbo (49 puntos), y que ayer se impuso en el añadido al Cristo Atlético.

El encuentro deja además dos sancionados para la próxima semana, Álvaro de la Iglesia y Manu Moreira, que no se medirán al Virgen del Camino el próximo sábado a las 17.00 horas, aunque el entrenador recuperará a Rubén Moreno y a Vílchez que ayer no pudieron estar con sus compañeros.

Después de reestructurar al equipo en el último momento por molestias musculares de Andoni, se inició un encuentro que, al contrario de lo que se podía esperar, no tardó en entrar en una tónica de tedio.

Bien es cierto que eran los zamoranos los que tenían la posesión ante la oposición de un rival que parecía no estar midiendo el desgaste físico (algo que acabaría pagando), aunque lo que también era una realidad es que en los primeros compases los rojiblancos no estaban teniendo opciones reales de gol e incurrieron varias veces en fueras de juego.

Parecía que una vez que se abriera la lata todo sería más fácil y Coque estuvo a punto de hacerlo con un disparo que se fue lamiendo el larguero y que supuso un punto de inflexión puesto que acto seguido se tuvieron dos saques de esquina en los que Juanan y Josema tuvieron cerca el gol. El Zamora CF parecía haber despertado mientras que los bercianos ya no estaban tan frescos y cometían continuas precipitaciones pero el marcador, superado el ecuador del primer tiempo, seguía sin estrenarse, y eso que los capitalinos tuvieron hasta una triple opción consecutiva, con Moreira de protagonista, que el meta Ivanildo despejó a duras penas, y poco después se vio un disparo de Huertas, tras un buen balón que le puso David Álvarez. Con la media hora superada el Zamora CF se había adueñado del encuentro y las aproximaciones a área se multiplicaban sin premio hasta que la suerte sonrió a los rojiblancos y Edu Ruiz convertía un penalti cometido sobre Aarón, el segundo que le conceden al equipo esta temporada y que el defensa lanzó fuerte y bien colocado.

Por el delante en el marcador todo parecía encauzado pero se esperaba más del Zamora CF en la segunda parte, a pesar de que el inicio volvió a ser bastante dubitativo motivado, quizá, por los problemas físicos de algunos jugadores, lo que propició que Balta adelantase los cambios. Poco a poco el equipo intentaba entonarse pero aunque su dominio estaba claro la falta de frescura y de chispa eran una evidencia difícil de disimular. El 1-0 no permitía relajaciones y de hecho el Bembribre trató de sorprender en una buena contra liderada por Dani Martínez que Valverde salvó de forma casi milagrosa cuando parecía que el balón se colaba en portería. Los de Balta pasaban los peores momentos y parecían desubicados en el terreno de juego, con apariciones fugaces y a cuentagotas con las que no lograban matar el partido, y es que lo más destacado en el segundo tiempo fueron sendos disparos de Aarón y David Álvarez.

Las decisiones arbitrales también parecían desquiciar a los rojiblancos que ya se habían puesto el mono de trabajo y llegaron a la recta final del encuentro sin pasar demasiados apuros pero sin convencer. A pesar de todo, se logró el objetivo, sumar otros tres puntos y dar carpetazo a un febrero aciago.